NUEVO LAREDO, Tamaulipas.- En los días que restan de esta semana y de fin del mes de agosto, en Nuevo Laredo, se mantiene el termómetro en los 40 grados centígrados, con sensación térmica de 43.
El Servicio Meteorológico Nacional de CONAGUA pronostica un ligero descenso de la temperatura para el próximo domingo.
Y ni una gota de lluvia.
Ganaderos de la región de Nuevo Laredo y Nuevo Guerrero reportan que el río Salado está a punto de secarse.
Gerardo Ramón Serna Aguilar, ganadero local y expresidente de la Asociación Ganadera de Nuevo Laredo, dicd que necesitan 4 pulgadas de lluvias para que se llenen las presas y a la vez, se refresquen los ranchos neolaredenses y de la región.
El agua que transporta el río Salado deriva de la presa Don Martín, en el estado de Coahuila y desagua en la presa internacional Falcón, en Tamaulipas.
Se enfrenta una sequía similar a la ocurrida en 1995 y que se prolongó durante 10 años.
En esos años, el nivel del río Bravo, en la región de Nuevo Laredo, llegó al mínimo ya que el agua apenas cubría los tobillos y se podría cruzar caminando al lado americano.
En 2005 se normalizó la temporada de lluvias.
Y en este 2019 vuelve la sequía con la esperanza de que en septiembre se tengan las tan deseadas y urgentes lluvias.
Fuente: La Verdad de Tamaulipas
