Vida Diaria
Rosa Elena González
Desde el lunes que CARLOS ARZÚA presentó su renuncia como titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público ya no es persona comprometida con la nación y la Cuarta Transformación, hoy es un neoliberalista fifí.
ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR dice que ARZÚA se fue porque tenía ideas neoliberalistas similares a las de JOSÉ ANTONIO MEADE o AGUSTÍN CARSTENS, que su proyecto económico para la nación es ajeno a la Cuarta Transformación.
Quizá ARZÚA tenía otros datos sobre la economía de México, muy distintos a los que LÓPEZ OBRADOR remarca cada mañana como si quisiera convencer a los mexicanos que vamos bien y en poco tiempo estaremos mejor.
“Discrepancias en materia económica hubo muchas. Algunas de ellas porque en esta administración se han tomado decisiones de políticas públicas sin el suficiente sustento. Estoy convencido de que toda la política económica debe realizarse con base en evidencia, cuando los diversos efectos de esta pueda tener libre de todo extremismo. Sea esta de derecha o de izquierda. Sin embargo, durante mi gestión las convicciones no encontraron eco”, publicó ARZÚA en su cuenta de Twitter, como justificación a su renuncia.
¿Quién de los dos realmente dice la verdad?, igual ambos mienten, son asuntos de choque de intereses entre uno y otro, por ejemplo si ANDRÉS MANUEL sabía desde el principio que el actuar de ARZÚA no comulgaba con sus ideas, ¿por qué lo contrató?, o cosa peor ¿por qué no fue el presidente el que le solicitó la renuncia?
Lo real de todo es que las políticas públicas de una nación deben manejarse siempre encaminadas a que se tenga una estabilidad o avance económico y éstas no pueden estar sujetas a caprichos de izquierda o derecha, el bienestar y progreso de un país no es de colores o ideologías políticas sino de compromiso con la patria y su gente.
Sea cual sea el motivo real de la renuncia de CARLOS ARZÚA la percepción es negativa, el impacto mediático fue fuerte, la impresión es que algo no está funcionando bien en la actual administración federal pues a tan solo siete meses de gestión ya son varios personajes que se han bajado de fea manera de la 4T.
Andamos tan mal que cuando los personajes están en el proyecto de la 4T son personas honorables, de buenos principios, responsables y comprometidos con la nación, pero apenas renuncian dejan de serlo y se convierten en fifís neoliberales moteados de la mafia del poder, bueno, al menos así lo dice el mismo presidente.
No debe el presidente desacreditar a los que le renuncian, porque al hacer esos comentarios negativos de quienes le dejan el changarro solo demuestra que no ha tenido la sapiencia para elegir correctamente a los hombres y mujeres que pueden hacer fuerte las políticas públicas de esta administración para bien de la nación.
En fin, la situación es que desde el lunes que presentó su renuncia CARLOS ARZÚA dejó de ser una persona seria, responsable y comprometida con la nación, hoy es señalado como corrupto, neoliberalista, fifí.
De lo dicho por ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, ARZÚA tiene otros datos, no concuerdan con los mencionados por el presidente, alega se va porque no está de acuerdo con el cómo se quiere manejar la economía nacional.
Como dijera la Chimoltrufia, será el sereno, lo cierto es que dan muestra de que las cosas no andan bien en este México lindo y querido, que las políticas públicas que se estaban manejando no son las correctas, la renuncia de ARZÚA deja un mal sabor de boca pero lo deja aún más las palabras de ANDRÉS MANUEL desacreditando todo lo que no comulga con él, con el que se va porque tiene otros datos.