México migrante
Por: David Ed Castellanos Terán
@dect1608
Hay muchas preguntas y muy pocas respuestas en relación a la negociación de México con Estados Unidos. En el Senado de la República, seguramente van a solicitar a nuestro flamante Secretario de Relaciones Exteriores para que comparezca, pues ciertamente se detuvo la imposición de los aranceles a importaciones mexicanas, y claro que se ganó tiempo.
San Marcelo Luis Ebrard Casaubón, ya dijo que el Gobierno mexicano demostrará que se puede reducir el millar de migrantes centroamericanos que usan nuestra patria como trampolín para ir en busca del sueño americano, sin embargo, parece contradictoria la postura del que manda, pues asevera que ayudará a los extranjeros para que tengan trabajo en México.
Nuestro presidente Andrés Manuel López Obrador, insiste en brindar apoyo a las personas venidas de países del sur y centro de América.
Por favor, tendríamos que ser más específicos con eso de “ayudar”, ¿cómo le podríamos ayudar al presidente a cumplir con esa meta?, si más ciudadanos viviendo en nuestro país apretaría los servicios de salud, la plaza laboral, las butacas escolares e incluso, elevaría el riesgo de que en México, los migrantes se vuelvan -o sigan siendo- carne de cultivo para los grupos criminales y traficantes de personas.
Quizás para muchos de mis hermanos mexicanos que no viven en una entidad fronteriza, les sea mucho más fácil aceptar que a México ingresen sin orden los amigos centroamericanos; tal vez ellos nunca hayan visto un Hospital Regional del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), sin capacidad para brindar servicio digno y de calidad a los huastecos de San Luis Potosí, del norte de Veracruz e Hidalgo, quienes con sus respectivas dolencias se trasladan hasta la ciudad de Tampico, en el sur de Tamaulipas para ser atendidos, pero su situación empeora, pues sus familiares duermen en las pocas butacas que hay; las áreas de urgencias aquí en el IMSS, como en el Hospital del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), está colapsada; qué decir del Hospital General de Tampico, o del Civil de Ciudad Madero en Tamaulipas, entidad por donde pasan los migrantes, aquí donde también es México y la atención médica es deplorable para con los mexicanos, pues la federación ayer, hoy y por los siglos, de los siglos se hace ojo de hormiga para no solucionar esta mortal necesidad.
Tal vez por eso les sea muy fácil a muchos hermanos mexicanos decir que “entren los migrantes”, sí, pero con orden, que en Tamaulipas se están muriendo los pacientes, y no es por no tener médicos capacitados, es porque el sistema de salud tiene hospitales que parecen más un callejón de pordioseros durmiendo en el piso, muriéndose en los pasillos y hasta gritando de dolor por espacio de varios minutos e incluso horas en las ambulancias, pues no hay camas para recibirlos y atenderlos; sí, qué fácil es decir “bienvenidos” cuando en las entidades fronterizas las cosas se podrán cada día peor.
En el ayer hasta acabaron con el mito de “la bestia”, hoy con esta postura, nos obligará a ser “Tercer país seguro”, ojalá, orden, se ocupa orden para entrar a México, y entonces para cuando nos hayamos organizado los mexicanos tendremos todas la capacidad de brindarles mejor calidad de vida a los hermanos centroamericanos; por mientras se mueren en los pasillos de los hospitales y esto de “bienvenidos”, con perdón suyo es una bobera más.
Por cierto, ayer en Reynosa, Tamaulipas; liberaron a un brasileño y siete migrantes privados de su libertad. Éstos se fueron de gane, otros ni siquiera son encontrados para darles cristiana sepultura.
¿Puedes realmente México? ¿Cómo te podemos ayudar?
davidcastellanost@hotmail.com
@dect1608