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Comentarios después del niño ahogado

Por Oscar Díaz Salazar

Entre las cosas absurdas que abundan en la política rascuache que se practica en Tamaulipas, destaca la faramalla que realizan los gobernantes, en los días posteriores a un fenómeno meteorológico, particularmente a una inundación.

Resulta que la prueba mayúscula de su ineficacia como gobernantes, la muestra de la falta de previsión para realizar las obras y tomar las medidas necesarias para evitar o mitigar los daños por la acción de la naturaleza, en este caso la lluvia, la convierten, por obra y gracia de su cinismo y de una buena campaña publicitaria, en la muestra inobjetable de que los gobernantes son un dechado de virtudes; que actúan inspirados por los más nobles sentimientos, que obran movidos por el compromiso social que tienen con sus representados.

El ejemplo más reciente es el paseo que realizan, el gobernador Cabeza de Vaca y la presidenta Maki Ortiz, por algunas de las colonias de Reynosa que amanecieron inundadas, -más de cincuenta-, como consecuencia de las fuertes precipitaciones pluviales que tuvimos en la tarde y noche de este lunes.. Pero también por la negligencia de las autoridades que no ordenaron el mantenimiento preventivo y correctivo de canales, sifones, drenes, vertederos y demás elementos de nuestra escasa infraestructura para el desalojo de las aguas pluviales.

Por alguna razón los gobernantes prefieren esperar a que se «ahogue el chamaco» para gastar en colchones, muebles, despensas y enseres domésticos, -que ya sabemos que en situación de emergencia se pueden comprar sin licitación y a cualquier precio-, que invertir en las tareas de mantenimiento y limpieza de los cuerpos de conducción de agua, para evitar o minimizar los daños.

La presidenta Maki Ortiz, en una declaración absurda, tonta y que representa una burla para los reynosenses, señala que hemos avanzado, porque antes nos inundábamos hasta la cintura y hoy solamente hasta las rodillas. Y en la perorata que repitió durante todo su recorrido por las anegadas colonias populares de Reynosa, afirma que en los dos meses recientes las cuadrillas del municipio realizaron labores de mantenimiento a drenajes, drenes, canales etc., siendo esto totalmente falso, pero eso ya no nos sorprende, porque sabemos que la señora es mentirosa.

El gobernador ha tolerado al recomendado de su hermano José Manuel y por eso permanece el arquinepto Luis Pinto al frente de la Comisión Estatal del Agua (CEAT) pese a las innumerables pruebas de su ineptitud. Hace un año, por estas mismas fechas, se inundaron varias colonias por el desbordamiento del «Dren de la Mujeres», pues el citado dren estaba obstruido por toneladas de lodos que ocupaban más de la mitad de su volumen. Obstruido estaba antes de la inundación del 2018, y de la misma manera permaneció, y continuó azolvado, hasta la inundación del día de ayer.

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