Por: David Castellanos
Luuuchaaaran de dos a tres caídas, siiiiin limite de tiiieempooo!
“El proyecto alternativo de nación”, presenta en su más reciente cartelera a “La Brava” vs “El rabias”, los mismos luchadores desde que Andrés Manuel López Obrador, era el favorito de la elección presidencial.
Me refiero a Citlali Ibáñez Camacho, alias Yeidckol Polevnsky Gurwitz, y Ricardo Monreal Ávila, los dos más grandes peleadores callejeros que representan la primera crisis interna de Morena, ya como partido en el poder.
El encontronazo entre Citlali y Ricardo, es una autentica pelea de barrio, ambos se están dando con todo, uno quiere noquear al otro, sí, algo muy típico de personas sin escrúpulos, principios y valores; la ausencia de los mandamientos que pregona la 4T les podría producir heridas muy graves que los dejaría al borde de la muerte, peor aún, sus militantes y candidatos no saldrán ilesos en el próximo proceso electoral que se avecina.
La batalla protagonizada por la peleadora “brava” Ibáñez Camacho, y el “rabias” Monreal Ávila, se da en lo público y lo privado, hasta llegar a las redes sociales, dándole un divertidísimo espectáculo al espectador que desde el palco de la oposición política, observa como se sacan los ojos y tumban desde antes de iniciar la campaña constitucional a sus próximos candidatos.
Ibáñez, que según es la encargada de hacer crecer la política e ideología del partido como dirigente nacional de Morena y Monreal, que se supone es el que debe cabildear con las distintas fuerzas políticas en el Senado y fijar los intereses de la nación, ninguno de los dos esta haciendo bien su papel, pues sus respectivas ambiciones personales los tienen peleándose con pico, piedra, palo, y cadenas en la arena política, mientras los otros se divierten.
El conflicto esta por todos los estados en donde habrá elecciones, en todos, pero en el territorio de Tamaulipas, la disputa por apoderarse del partido y controlar las elecciones del 2019, ya lo rebaso todito; tanto que son comparados con la suripanta paerredista que igual se burla de ellos aunque esta moribunda.
El pasado domingo 24 de febrero se realizó un acto llamado: «de unidad», el cual se llevó a cabo en Cd. Madero, al evento se presentó el nuevo delegado por Morena: Marcos Carlos Crúz Martínez, el espectáculo fue grotesco.
Tratando de demostrar el poder de convocatoria, Adrián Oseguera Kernion, presidente municipal de Madero, puso en la primera fila a sus invitados especiales, me refiero a sus aspirantes a candidatos a diputados locales:
Elena Cuervo, distrito 19; Marco Cortés, distrito 20; José Luis Ornelas, distrito 21 y Sergio Solbes, distrito 22.
Hasta allí todo de maravilla, pero tuvieron que acarrear a ciudadanos del municipio de Tampico para poder llenar el Gimnasio de la Unidad Deportiva maderense.
Después de eso la primea sorpresa, durante la madrugada del 25 de febrero, la Comisión Nacional de Elecciones, emitió una lista de precandidatos, para los 22 distritos electorales de Tamaulipas… Cabe mencionar que varios de esos aspirantes no han trabajado en y para la estructura interna de Morena en Tamaulipas, y otros de esos precandidatos ni siquiera son militantes del partido, lo peor del caso es que todos siempre han ejercido el ejercicio político en estructuras panistas, además de tener un perfil muy bajo como para ser representantes de la ciudadanía en el próximo congreso.
La designación de estas personas causo una enorme desilusión y decepción para la verdadera militancia protagonista del cambio verdadero, el enojo sacudió al partido del presidente pues todo el electorado tamaulipeco, claramente se percató que ninguno de esos supuestos precandidatos están a la altura para ganar alguna diputación. Morena, perdería todo.
Un ejemplo fue el caso del distrito 20, nombrando dos precandidatas externas que siempre han militado y trabajado para el Partido Acción Nacional, una de ellas es ama de casa –todo mi respeto como persona- y la otra es una magnifica educadora. Pero ni siquiera figuran en Morena, eso sobre todo fue lo que lastimo a la militancia.
El espectáculo siguió toda la semana, pues el día 27 de febrero la “brava” líder nacional, mencionó que el “rabioso” no tiene porqué meter las manos en el proceso interno para la designación de precandidatos, haciendo mención que el trabajo de su contrincante es donde dice: «la patria es primero», refiriéndose al Senado de la república, mientras que ella defendía los derechos de la verdadera militancia de morena, esa que trabajó el año pasado en el proyecto de nuestro actual presidente, don Andrés Manuel López Obrador. Pero la designación de varios precandidatos de la lista que emitió la comisión nacional de elecciones, no tuvo congruencia.
Apenas este 28 de febrero, Alejandro Rojas Díaz Durán, un “payaso de heces”, publicó que había impugnado, ante el Tribunal Electoral de Tamaulipas (TIETAM), la elección interna de los candidatos que emitió doña Citlali, ya que iba en contra de la verdadera militancia porque con esos “gallos”, está el riesgo de perderse la elección del próximo proceso electoral, y que él defendía a los verdaderos morenos de Tamaulipas ¡pura mentira!
Entonces ya que según Rojas Duran, no se tomó, ni sé consideró en cuenta a la verdadera militancia de Adrián Oseguera, mucho menos a los de José Ramón Gómez Leal, delegado federal de la 4T en los Distritos electorales de Reynosa; ni los liderazgos de Mario López, de Nuevo Laredo y Matamoros; tal parece que el “payaso de heces”, desconoce que las personas mencionadas por él mismo, pero sobre todo sus prospectos «candidatos recomendados», ninguno es de Morena, todos son personas externas al partido de la esperanza de México, pero lo peor del caso es que todos estuvieron operando en contra del proyecto y candidatura del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Hasta hoy en Tamaulipas, todos los candidatos o «precandidatos recomendados» son las personas que tanto han contribuido para dañar a Tamaulipas, y son causantes de lo que se vive hoy en el estado, puesto que tienen años viviendo del poder y del erario sin llenadera… Bueno esos de Morena, son tan mentirosos e incongruentes que no tocan al gobernador ni con el pétalo de una rosa, sino todo lo contrario, le ponen el camino fácil para que el mandatario estatal gane el Congreso, pues hasta hoy no se sabe quién es más mentiroso con la militancia de Morena, si la señora Ibáñez o don Ricardo.
Es así que mientras ellos se bombardean, y confunden a los morenistas; los panistas y priistas, se ríen y van campantes a las curules de la próxima legislatura.
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