POSDATA
GASTÓN ESPINOSA GLZ.
En Morena el asunto de las candidaturas va a terminar como “el rosario de Amozoc”.
Ayer, durante el cierre de registros para quienes aspiran a la candidatura a las diputaciones locales, se presentaron casi 300 solicitudes para 22 candidaturas que se ocupan. Los personajes que se dieron cita a la sede del partido ubicado en la capital del estado provenían de las más distintas corrientes ideológicas: PRD, MORENA, PRI y PAN.
Para el distrito con cabecera en San Fernando se registraron 18 aspirantes; Matamoros 15; Victoria 12 y en el caso de El Mante 6.
Lo que pudiera ser un dato anecdótico guarda en sí mismo una preocupante verdad. Morena va caminando hacia su propia perdición. Los aspirantes están tan divididos y confrontados que poco o nada van a querer aportar a quien resulte electo como candidato.
Vayamos al caso de El Mante en donde los seis que se registraron para buscar la candidatura a la diputación local por el distrito 17, están diametralmente opuestos en proyectos. Reyna Edith Guevara, Benjamín López, Refugio Espriella, Omar Salomón, Javier Villarreal Terán y Miguel Padrón Solís, son los que anunciaron su registro.
Y aquí la radiografía política de algunos de ellos.
A Jorge Salomón, el dirigente de Morena en la ciudad, nadie lo hará entender que poca ayuda al Movimiento con sus declaraciones de odio, no solo hacia los aspirantes externos sino también en contra de los de su propio partido, ya que Julio César Hernández y Pedro Castillo, han sido víctimas de las declaraciones siempre desafortunadas del líder de Morena. Para Jorge Salomón no habrá pero que valga si su hijo Omar no es electo como candidato a la diputación local. Dios agarre confesados a los dirigentes estatales de Morena y a quien resulte beneficiado con la candidatura, porque le lloverá de todo si es que Omarcito no es el bueno.
Refugio Espriella, es de los fundadores de Morena y de los primeros en levantar la mano. Tiene un buen grupo de seguidores apoyándolo para su proyecto político los cuales han manifestado su rechazo para que el partido postule a personajes de poca estima social y mucho menos cuando ya fueron servidores públicos y no rindieron buenas cuentas.
Javier Villarreal Terán, es quizá el caso más patético de lo que ocurre en Morena. Un exalcalde priista, delegado de Economía en Tamaulipas, Secretario de Turismo y diputado local, que tras años de ausencia pretende regresar a las mieles del poder.
Javo, como le conocen sus amigos, presume de una supuesta relación con Ricardo Monreal, historia con la cual ha podido abrir algunas puertas a los eventos de Morena, aunque realmente no exista una sólida relación con el exgobernador de Zacatecas, pero Javier es así. Le encanta mentir, seducir, imaginar, crear escenarios.
Su presencia en ese partido provoca disgustos y mareos entre la clase política de Morena. Hacerlo candidato provocará una verdadera revolución al interior del partido que se verá reflejada en las urnas. De antemano, Villarreal Terán es la carta más endeble que tiene el partido de Andrés Manuel para contender por la diputación local.
A Benjamín López y Miguel Padrón Solís, no se les ve trabajando por cualquiera de los aspirantes que resultaran favorecidos. Y a todo este desgarriate está el hecho de que Morena se ha ocupado por confeccionar promesas ciudadanas y no estructura, tomando en cuenta que en el PAN los “diablos” van a operar la elección.
Así que, ni mandado a pedir aplica el dicho para Morena de “divide y vencerás”. En su proceso de selección de candidatos se han evidenciado como un partido que corre el riesgo de perderse en una lucha intestina como ocurrió hace unos años atrás con su partido madre; el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en donde las famosas “tribus” privilegiaron sus proyectos personales al bien común, con nefastos resultados en las urnas.
Todo parece que Morena camina pian pianito hacia su perdición.
EL MANOTAZO OPORTUNO DE TRUKO
La reunión fue el viernes pasado en casa del alcalde de Gómez Farías.
Ahí estaban algunos alcaldes de la región, candidatos y funcionarios.
El que llevaba la batuta del encuentro tenía cara de pocos amigos, pero había razones para ello. A su mesa llegaban las quejas de algunos alcaldes panistas que no estaban de acuerdo con la designación de los candidatos a diputados locales.
Casos concretos, el de Ocampo, en donde el alcalde Jesús Ávalos Puente, no ocultaba su molestia por la designación de Juan Enrique Licega, como candidato a diputado local. A varios de sus allegados les dijo que no apoyaría esa candidatura bajo ningún acuerdo. Incluso se echó a los brazos de José Ramón Gómez Leal, el súper delegado del gobierno federal que acusó visita al vergel tamaulipeco, y con quien tuvo un acercamiento más allá del ámbito oficial. (¿Traición?)
En Nuevo Morelos, cercanos colaboradores de la alcaldesa, Eunice Hernández, no quieren estar colaborando con el exalcalde priista de ese lugar, Tony Rivera, de reciente adquisición panista.
La disputa entre el PAN de Eunice y el PRI de Tony Rivera dejó heridas muy profundad que no han podido cicatrizar.
En El Mante, algunos grupos al interior del PAN, desafían la señal de respaldar el proyecto de Sonia Mayorga López, la eventual candidata a diputada local. Eloy Martínez y Ruth Verástegui, son algunos botones de muestra.
Desde González, Guillermo Verlage, condicionó la ayuda para Sonia al hecho de poner a su esposa como candidata suplente, cosa que logró finalmente.
También hubo regaños para algunos alcaldes que le han flojeado desde que arrancaron sus administraciones, como Antiguo Morelos (Eva Ávila), aunque su marido Carmelo Tinajero, fue quien se llevó el reproche, pues todo mundo sabe que manda tras las faldas de su mujer. El anfitrión de la reunión, Francisco López Reyes, alcalde de Gómez Farías, se llevó su coscorrón.
Por eso, el manotazo fuerte que dio César Verástegui durante el encuentro con quienes configuran la política regional era más que necesario. «Truko» sabe lo que se juega, por eso el interés especial en ordenar la casa. El regaño llega oportuno y muy entendible. A César le ha costado mucho esfuerzo conquistar esta zona para Acción Nacional como para dejarlo perder por culpa de berrinches y caprichos.
Tan tuvo éxito la reunión, que ya algunos alcaldes y funcionarios han empezado a desfilar en las eventuales casas de campaña de los candidatos.
¿Qué les costaba?
LA BAÑADA PARA ALEJANDRO ROJAS
Le tocó.
Más bien, le mojó.
Así de bravos están los grupos al interior de Morena.
Durante una entrevista, Alejandro Rojas, fue insultado y bañado en protesta porque los morenistas no han sido escuchados por Ricardo Monreal.
Ahora falta ver la respuesta de quien se presume es el golpeador consentido de la presente administración estatal. Hay que prestar atención a lo que dice.
