Chihuahua, Chih. Andrés Manuel López Obrador llegó a palacio de gobierno poco antes de las 11:00 horas, acompañado del gobernador Javier Corral Jurado y Juan Carlos Loera De la Rosa, próximo coordinador de programas federales en Chihuahua.
Un grupo de costureras indígenas se congregó detrás de las vallas que impedían el acceso al recinto, pero López Obrador rompió el protocolo y se acercó a ellas para escuchar una solicitud de apoyo.
En otra manifestación, frente a palacio de gobierno se congregaron indígenas de los ejidos Laguna, San Elías, San Luis de Majimachi y Panalachi, municipio de Bocoyna, para exigir se revise la concesión de la empresa TransCanadá encargada de la construcción del gasoducto Encino-Topolobampo en la Sierra Tarahumara.
También protestaron por la represión de la Policía Estatal contra una manifestación de indígenas hace dos meses.
Antes de entrar a palacio de gobierno, Andrés Manuel López Obrador posó para la fotografía junto al gobernador de Chihuahua.
Un Javier Corral efusivo y sonriente extendió el brazo para el apretón de manos, sobre la banqueta de la céntrica calle Libertad, la misma que el gobierno de Chihuahua negó en enero pasado a López Obrador para que realizara un mitin como precandidato presidencial.
La reunión entre el gobernador de Chihuahua y el próximo presidente de México se llevó a cabo a puerta cerrada, con la participación de legisladores federales y locales, funcionarios estatales y empresarios.
