LOS PANISTAS GARAÑONES
Joaquín Olea
Uno de los requisitos (al parecer el más importante) de los machos alfa de la cantera panista para ser admitidos como funcionarios en la administración actual de Tamaulipas es ser de pito ingobernable.
El reciente “affaire” del senador panista Ismael García Cabeza de Vaca fue solo la punta que comenzó a desenhebrar la madeja.
En Ciudad Victoria es chisme común la psicótica situación en la que viven muchas empleadas de las dependencias instaladas en la torre de gobierno. Presuntamente acosadas sexualmente por jefes de departamento, subdirectores, directores y hasta subsecretarios.
Pero es la chamaqueada que la prensa nacional le diera al senador de partido Cabeza de Vaca la que rompe los muros del silencio, desgranando la mazorca de hábitos garañones de los persignados funcionarios panistas.
Esta semana se dieron a conocer públicamente dos casos más.
El primero se refiere a un personaje llamado Pablo Valadez Coronado, quien recién rindió protesta como segundo sindico en el municipio de Tula.
De acuerdo al reportero de Gb Noticias, Gerardo Balderas, citando la página de redes sociales “Denuncia Tamps” “–dice que ya son muchas las mujeres afectadas, donde el presunto las acosa sexualmente a cambio de darles trabajo–”
Valadez Coronado se desempeñó anteriormente como Presidente del Consejo Distrital de Desarrollo Rural Sustentable. Paradójicamente durante su paso por esta Secretaria, a Desarrollo Rural se le mencionaba como el lugar donde más se acosaba a las empleadas. Los noveles garañones panistas, fieles a la filosofía porfirista llegaron exigiendo, como derecho político divino, “el derecho de pernada”
El personaje asegura que a él le hacen lo que el viento al Benemérito. Ya que él cuenta con todo el apoyo de la Secretaria General de gobierno.
Valadez Coronado, como se puede apreciar en una foto publicada recientemente, al parecer lleva también una gran amistad con el senador Ismael García Cabeza de Vaca.
Por otro lado, el periódico EL PAPEL de Orizaba, Veracruz, denuncia que el director del Itavu en Tamaulipas, Ing. Salvador Gonzales Garza cobra con sexo las gestiones de la dependencia.
Dicho medio asegura que este funcionario panista “es un depravado que abusa de empleadas y ciudadanas que asisten a realizar todo tipo de gestiones”
Urgir a la Contraloría General del Estado a investigar estas denuncias sería un inútil llamado a misa. Nadie en las altas esferas del gobierno panista tamaulipeco lo escucharía. En la “costra nostra azul” panista se cuidan, se protegen y se defienden.
Máxime cuando al parecer, ser un probado macho alfa, garañón y semental, es un requisito indispensable para ser parte del grupo panista en el poder.
Para la diputada de Morena Tatiana Clouthier “este tipo de comportamientos ha sido muy consistentes en el PAN”… Los panistas “requieren desfogues públicos relacionados con cuestiones sexuales para poder sentirse bien” –dijo Clouthier.
Recordó la reunión plenaria del PAN en Puerto Vallarta en 2014 cuando los legisladores panistas contrataron a un grupo de escorts VIP para bailar y beber durante su “extenuante” reunión.
Termino diciendo que “quizá habría que pedir un análisis psicológico de los diputados panistas”
No olvidemos que ella, alguna vez, fue miembro importante de este partido.