Por: Armando Castillo
Al inicio de la nueva Administración Federal, los programas sociales habrán de ser revisados y auditados, y eliminando de ellos el intermediaríamos, adelantó José Ramón Gómez Leal, al mencionar que algunos cambiarán de nombre y otros tendrán que ser eliminados.
“En el caso del programa 65 y más, que fue creado cuando el Presidente electo Andrés Manuel López Obrador fue Jefe de Gobierno en el entonces Distrito Federal, habrá de ser revisado, se habrán de eliminar intermediarios para que no continúe como está hoy”, señaló el coordinador estatal del próximo gobierno federal.
Los beneficios que arrojan los programas sociales van a continuar y en ellos seguramente se van a incluir a los adultos mayores que ahora no están considerados dentro de los mismos, asentó al citar que la revisión que se haga de los padrones de este tipo de programas habrán de asegurar una mayor cobertura.
Hay programas como PROSPERA, cuyo padrón también está considerado llevar a revisión y quizás cambie de nombre, pero es un hecho que va a continuar bajo un nuevo esquema de asignación de apoyos, precisó.
“Existe por supuesto la posibilidad de crear nuevos programas sociales y en ello se está trabajando, algunos de los que existen solamente se revisarán, se harán más efectivos y como en el caso de 65 y Más, que a partir del nuevo sexenio se llamará Adulto Mayor, otros podrían cambiar también de nombre”, destacó.
Lo que es un hecho también es que los apoyos van a ser entregados sin intermediarios, van a ser directos, ya que ahora muchos programas tienen intermediarios y a veces son quienes les dan prioridad a un partido político antes que al ciudadano, ya las personas no se van a sentir acosadas al ir o no a un evento, amenazadas de que se les puede quitar esa ayuda, señaló.
Reveló que en estos momentos, faltando poco más de tres meses para el inicio del nuevo sexenio federal, se estudia cada uno de los programas para definir cuáles de ellos siguen y cuántos de ellos deben de desaparecer, así como también, definir cuántas dependencias desaparecen o se fusionan, como en caso de LICONSA y DICONSA que ya se ha tomado la decisión de fusionar.
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