CIUDAD DE MÉXICO.- Hace unos días te comentamos que enterrarse en la arena de la playa puede ocasionar severas infecciones en la piel.
Según dermatólogos, durante la temporada vacacional las consultas se elevan hasta un 50 por ciento.
Recientemente se dio a conocer que en el estado de Tennessee, al sur de Florida, Michael Duma, un adolescente de 17 años vivió una pesadilla después de que contrajera una infección de anquilostomas en una playa.
Con la idea de disfrutar sus vacaciones y el buen clima el muchacho no dudó en salir con sus amigos, quienes lo enterraron en la arena a manera de broma. Sin embargo, jamás imaginó que ese juego le causaría mucho sufrimiento.
De acuerdo con la cadena local Memphis, poco después comenzó a sentir picazón y más tarde desarrolló ampollas y erupciones severas en la parte inferior de su cuerpo.
Una de ellas mide 7,6 centímetros por 7,6 centímetros. Es un cráter en su pie. Es horrible y muy doloroso», señaló Kelli Dumas, la madre del joven.
Luego de una revisión médica, el adolescente fue diagnosticado con anquilostomas, unos parásitos que normalmente infectan a los animales y habitan en zonas tropicales o subtropicales.
Algunas especies de anquilostomas que infectan a gatos y perros pueden transmitirse a las personas a través de arena o tierra contaminada después de que los animales infectados defequen en la arena y depositen huevos de anquilostoma en sus heces.
Por esta razón no es recomendable caminar descalzos en la arena, por muy rico que se sienta. Las larvas de este parásito pueden perforar la piel humana y luego desplazarse entre las capas superiores de esta.