El niño ya no está. Yo estoy mal”, con estas frases Verónica Cruz Alavés trató de manifestarle a sus familiares que había asfixiado a su hijo de apenas 2 años y que luego intentó suicidarse en su casa, en el municipio de Apodaca.
Según una fuente allegada a las investigaciones, el miércoles por la noche la mujer mató a su hijo Cameron Antuan y trató de informarle a su mamá y a una hermana repitiéndoles: “el niño ya no está”, pero no le creyeron.
Debido a que Verónica se encontraba bajo tratamiento por una depresión mayor, sus familiares creían que les mentía, además de que estaban en el hospital con un hijo que se había accidentado.
Ayer, poco después de las 15:00 horas, la presunta homicida se volvió a comunicar para decirle a sus familiares que su hijo ya no estaba y que ella estaba sangrando del cuello, por lo que la hermana se dirigió a la casa ubicada en la calle Paseo del Sauce, en la Colonia Paseo de los Nogales.
Para entonces, vecinos del sector ya habían solicitado el auxilio de la Policía y de una ambulancia, cuando escucharon los gritos de la mujer y la vieron sangrando del cuello.
Ahí descubrieron que la mujer de 27 años había asfixiado a su hijo con una cobija.
Verónica, quien es optometrista, les dijo a los policías de Apodaca que tenía problemas con su ex pareja por la manutención del niño, por lo que estaba muy presionada.
Antes de que fuera internada en el Hospital Metropolitano, confesó que tomó una cobija con la que cubrió a su hijo de la cara hasta asfixiarlo.
Posteriormente, tomó un cuchillo con el que intentó quitarse la vida al clavárselo en el cuello, pero no se causó heridas profundas que pusieran en peligro su vida.
Peritos de la Procuraduría de Justicia estatal llegaron al lugar para recolectar las evidencias en la escena del crimen y con ello tratar de establecer y corroborar la versión de la presunta homicida del menor.
Al sitio también acudieron elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones, quienes entrevistaron a vecinos para establecer cómo ocurrieron los hechos.
