CHOQUE DE TRENES
Jesús “Chucho” Nader no ha perdido el tiempo, está dedicado a lo que ha perseguido desde hace mucho…
Él sabe que esta es su oportunidad más clara de llegar a la Presidencia Municipal de Tampico, tiene todo el apoyo y simpatía del número uno de Tamaulipas, eso cuenta y cuenta mucho, pero además, ha conquistado ya el respaldo de los más destacados panistas del puerto a los que ha ido convocando para cerrar cualquier brecha que se interponga hacia su objetivo.
“Chucho” sabe que el 2018 es propicio para su consolidación política y por ello está ocupado enla confección de una fuerte -y al mismo tiempo fina- urdimbre electoral que lo lleve al triunfo en las elecciones del 1 de julio.
Con inteligencia y discreción está conformando un equipo de lujo, apoyado por exitosos empresarios, líderes de grupos sociales y simpatizantes de diferentes colores, que serán la plataforma que se enfrente a sus adversarios en la jornada electoral que se avecina.
Por otro lado, el principal adversario de “Chucho” podría ser la maestra Magdalena Peraza Guerra, alcaldesa de la ciudad, quien aún no ha dado a conocer su intención de si buscará o no la reelección; la “teacher” cuenta con un fuerte caudal político ganado en mil batallas, merced a su innata facilidad de hacer amigos en todos los sectores.
Pero además, la maestra ha sido una excelente funcionaria pública, forjada en la cultura del trabajo y reconocida por su pulcritud en los manejos del erario municipal. Como dijo alguien, si se lanza al ruedo, será un choque de trenes.
En Altamira las cosas podrían ser más que tersas, dado el hecho de que la señora Alma Laura Amparán ha logrado conquistar las preferencias de sus gobernados en base al trabajo diario y el contacto directo con la gente.
La señora Alma Laura será la candidata del PAN en Altamira, con altas probabilidades de triunfo. Ella ni siquiera necesita hacer campaña, cuenta en su haber político la confianza popular, la que le será refrendada, sin duda alguna, el 1 de julio de este año en las urnas electorales.
Seguro que Alma Laura Amparán seguirá al frente de la comuna otros tres años para consolidar y dar seguimiento a los proyectos urbanísticos de su activa administración municipal.
Y en Ciudad Madero, pues francamente Adrián Oseguera Kernion sigue cosechando afectos, apoyos y voluntades, además de triunfos políticos, como el otorgado recientemente por el Tribunal Electoral respecto a su constancia de residencia, lo que lo coloca en el umbral de una nueva administración municipal, encabezando el cambio de la esperanza en la urbe petrolera.
Adrián Oseguera será el candidato de Morena el 1 de julio, quien seguramente será beneficiario del voto en cascada que se originará en la corriente de Andrés Manuel López Obrador, puntero de las preferencias para la Presidencia de la República.
De ser así, Ciudad Madero tendría a partir de octubre de este año un alcalde con excelentes cualidades de mando, firme en las decisiones, suave en el trato, pero estricto en lo que es justo, conocedor absoluto de la necesidades de Ciudad Madero y amigo leal de las clases populares.
Claro, hay otros actores, pero aún no se han decidido.
P.D.- Sabia virtud de conocer el tiempo.