POSDATA
GASTÓN ESPINOSA GLZ.
La detención de dos trabajadores del Hospital Civil de ciudad Madero acusados de robar medicamento y poner en riesgo la vida de un paciente es apenas la punta de un iceberg.
Médicos, Enfermeras, Directivos de Hospitales, Funcionarios estatales y federales, han cruzado declaraciones en torno al problema de desabasto de medicamentos e insumos, lo que ha llevado a personal de varios nosocomios a trabajar bajo protesta o simplemente dejar de atender a los pacientes.
Tras las “espontáneas” muestras de inconformidad en los hospitales y que incluso llegaron a palacio de gobierno a través de un plantón, hay que resaltar la presión que ejercen los líderes sindicales desprovistos de influencia para seguir haciendo de las suyas.
Quienes pretendieron endosar el problema del desabasto de medicamento y equipo al gobierno del estado no se detuvieron a pensar que la respuesta de la autoridad sería contundente.
Hace apenas unos días se ejecutó la detención de dos trabajadores del Hospital en Madero, quienes a decir de la autoridad robaban el medicamento y con ello pusieron en peligro la vida de un paciente. Se trata de Marco Antonio Martínez, encargado del Almacén y José Alejandro Salas Carrascosa, del departamento de Recursos Materiales.
Según la indagatoria había medicamento en existencia e insumos para realizar una intervención quirúrgica el pasado tres de julio, pero los servidores públicos obstruyeron con su negativa el servicio a la salud.
Ante el incidente, la Secretaria de Salud en Tamaulipas, Gloria Molina, dijo que están revisando Hospital por Hospital para verificar el abasto efectivo y que los trabajadores tengan con qué laborar.
Reveló la funcionaria que de veinte Hospitales que hay en Tamaulipas, diez han sido supervisados de los cuales ocho presentaron irregularidades: “En uno de los hospitales encontramos como 18 mil piezas de medicamento caducado, almacenes que guardan bajo llave medicinas, lo que menos quisiera pensar es que es para sacarlos del hospital y venderlos”.
La funcionaria sabe que hay grandes brechas que se vienen arrastrando pero que han sido cerradas en cuanto al abasto de medicamento y servicios especializados ya que se ha optimizado el recurso y se ha erradicado viejas prácticas en la compra de medicina y material de curación.
Una buena noticia es lo dicho por la titular de la Secretaría de Salud confía en el sentido de que se contará en breve con la cobertura al 100 por ciento en el abasto de medicamentos y de no contar momentáneamente con la medicina en las unidades hospitalarias del estado, se autorizará un vale para la compra.
La misma Procuraduría de Justicia entró al tema al exhortar a la ciudadanía para que denuncie a los servidores públicos que no atienden las necesidades básicas en materia de salud en todos los Hospitales públicos para terminar con esas irregularidades.
La respuesta de los trabajadores se ha dado a través de cartas anónimas en donde destacan que el sector salud en el estado está colapsado “aunque el gobierno del estado culpe a funcionarios y amenace con mandarlos a la cárcel por el robo de medicamento”.
Relatan que desde hace nueve meses se suspendió la adquisición de medicinas al actual proveedor lo que ha generado un grave problema en los hospitales del estado porque no hay ni curitas y que sería hasta el tres de septiembre cuando un nuevo proveedor abastezca a los hospitales
Otro que le entró al tema es el Secretario de Salud en México, José Narro, quien reveló que se aplica una auditoría laboral en todo el país, no solo en Tamaulipas, la cual pronto habrá de concluir para saber de qué tamaño es el problema, “porque esto no puede ser así”.
En la auditoría participan la Secretaría de Hacienda y los gobiernos estatales, y en base a ello podrá conocerse la dimensión del problema que enfrenta el sector salud ya que no puede existir más personal administrativo que técnicos, médicos o enfermeras: “Estamos haciendo una auditoría laboral en todo el país incluyendo Tamaulipas, pronto la vamos a concluir; esto no puede seguir, en el gobierno del presidente Calderón se formalizaron 68 mil trabajadores, en el gobierno de Enrique Peña 65 mil trabajadores, pero no podemos formalizar hacia el infinito”.
Y puso el dedo en la llaga al referirse al problema laboral: “En cualquier sistema de salud hay eventuales (…) no se engaña a la gente, y no todo el mundo puede tener una plaza, lo que si debe tener cualquier trabajador es su sueldo y no estar subcontratados o sin prerrogativas de seguridad social”.
El asunto pues tiene a todos curándose en salud en tanto los pacientes siguen siendo excluidos con esas carencias al más fundamental de sus derechos.
PD: El Mante fue uno de esos Hospitales que han sido revisados. Se esperan noticias.
PACO LAGRIMITAS
Cada una de sus lágrimas son falsas.
El llanto que derrama es mero disfraz, con ello quiere tapar su incapacidad.
Dejó de ser Pancho botes para convertirse en Paco Lagrimitas.
Es claro que Francisco López Reyes no puede con el paquete, en mala hora la gente de Gómez Farías el dio el voto por segunda ocasión.
Y es que el alcalde ha sido evaluado por gobierno del estado y sus notas no son muy alentadoras lo que tiene irritados a los políticos que apoyaron su proyecto porque no ha cumplido ninguna sola de sus promesas.
El municipio sigue carente de obra pública, no hay apoyo a la educación, salud ni deporte, pero para el alcalde y su esposa los gastos son exorbitantes, recordando aquella ocasión en la que Paco se compró una camioneta de lujo para apenas dos calles pavimentadas.
Gómez Farías no merece un alcalde de esta naturaleza, para eso de lágrimas ya fue mucho, lo mejor que puede hacer es ponerse a trabajar, gestionar, presentar proyectos como lo hacen los otros presidentes municipales. Lo único bueno que sabe hacer Paco es andar de enamorado, echar la copa, darle contratos a su cuñado y poner en nómina a la familia.
ANTÍDOTO CONTRA EL CACIQUE
Se llama José Rosario Sánchez.
Sus amigos en Antiguo Morelos le dicen “Chayo”.
Todo hace indicar que puede ser el antídoto para echar a los Tinajero de la presidencia municipal.
De hecho, el año pasado pudo ser el candidato del PRI, pero varios factores evitaron que así fuera, sin embargo, nada parece que va a impedir su designación como candidato a la presidencia.
Chayo tiene estima social, la gente le sigue, trae mucha gestión social, por eso hoy los Tinajero acosan a las personas que se acercan a él, le siguen sus pasos y buscan impedir que aparezca en la boleta electoral. El miedo no anda en burro.
