Maremágnum
Mario Vargas Suárez
Gastos dobles
Un documental realizado por estudiantes de la licenciatura de Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, que dirige el Dr. Enrique Alfaro Dávila, en la Autónoma de Tamaulipas, simple y sencillamente me cautivó.
Un grupo de universitarios que actualmente realizan cursos intensivos de verano, proyectaron un video que denominaron ‘Ciencias Noticias’ como parte de su evidencia sobre el aprendizaje y la utilidad de la ciencia de la Persuasión.
En el mensaje videograbado, los estudiantes distinguen el concepto de Persuasión, de otras formas para hacer que un público meta cambie de opinión sobre un tema determinado, sin que el sujeto se vea obligado a nada.
Lo importante es que el o los destinatarios del mensaje cambien su modo de pensar para que actúen conforme a una intención prevista, sin que perciban la intromisión de un tercero. Esto es, los jóvenes dejan en claro que persuadir es la habilidad que tiene el ser humano para transmitir ideas y que éstas sean difundidas en su actuar por quien actúa como receptor de las mismas.
La persuasión como herramienta puede ser utilizada en el mercadeo, la publicidad y el comercio, básicamente sectores en los que el público es sensible a diversas interacciones y en donde la decisión es el objetivo de quien persuade.
Lo anterior se relaciona con el malestar de muchos padres de familia cuyos hijos están inscritos en una escuela privada y que se quejan de lo lineal de las indicaciones para la compra de uniformes y útiles escolares.
Un abogado hizo pública su queja y aunque no menciona el nombre de la institución en Facebook dice que vía correo electrónico le notificaron de la escuela donde estudia su hijo, la fecha última para pagar la reinscripción y horario de oficina. Esto es normal y lógico.
Lo que no es normal y mucho menos lógico, dice el molesto padre de familia es que “En archivo adjunto, viene una lista de los útiles escolares -libros y cuadernos- con una nota en mayúsculas que dice “No se aceptaran cuadernos que no sean institucionales. Evite hacer gastos dobles”
En este espacio es cuando la ciencia de la Persuasión hace su aparición. ¿Porque el público meta es agredido con los mensajes del colegio? El padre por lógica dice “…definitivamente no debe ser así, no se puede obligar a comprar o adquirir esos artículos en el propio colegio o plantel…”
El padre de familia, abogado de profesión, dice en FB “…en nuestro país están prohibidas las prácticas monopólicas… por ningún motivo la escuela debe obligar a los padres de familia a comprar útiles escolares con un proveedor en particular o en la propia escuela, y lo mismo aplica para uniformes, libros o cualquier otro artículo.”
Las reflexiones legales que hace el jurista tamaulipeco no están apartadas de la razón, cuando dice que “Si fuera necesario adquirirlos los textos con ciertos proveedores, los precios no podrán ser más altos que los disponibles al consumidor en el mercado.”
“Tampoco pueden exigir libros, útiles escolares o uniformes nuevos. La única exigencia será que los libros correspondan a ediciones actualizadas, y que los uniformes y útiles estén en buen estado, lo anterior está fundamentado en la Ley Federal de Protección al Consumidor.” Argumenta el licenciado en derecho.
La queja del padre de familia es muy amplia y con este extracto me parece suficiente para denunciar una arbitrariedad más de los comerciantes de la educación cuyo objetivo principal es la ganancia financiera, aunque también es válido apuntar que algunas tienen aceptable infraestructura y una planta docente prestigiada. Amén de programas adicionales que hacen de una educación diferente a la de una escuela pública
Justo es decir que las autoridades educativas y las de protección al consumidor no reciben quejas directas de los padres de familia ni de nadie, porque la opción es sencilla: ‘Si no le parece, retire a su escolar del plantel’. De ahí la ‘amenaza’ de “Evite gastos dobles”
