Nicasio Fonseca Munguia
«Existe una campaña nacional dirigida con el propósito de presentar a un AMLO que pierde posicionamiento y que, pese a encabezar las encuestas rumbo a 2018, va a la baja en la intención del voto ciudadano, empatado técnicamente con Margarita Zavala, algo que sólo lo creen en Bucareli y Los Pinos, por así convenir a sus intereses.»
A todas nuestras lectoras, lectores y quienes nos honran de leer Quijoteando, hacemos una respetuosa aclaración, AMLO no es el candidato de nuestras preferencias para la presidencia de la república, por la simple y sencilla razón de que a la fecha, ninguna o ninguno de quienes se vislumbran en el panorama político nacional, consideramos tengan la capacidad, como el compromiso social para sacar adelante la grave situación por la que atraviesa el país, a través de una propuesta que esté a la altura de las circunstancias. Pese a ello, lo anterior no limita nuestra capacidad de análisis para darnos cuenta objetivamente, que el político tabasqueño encabeza con mucho las preferencias de la ciudadanía, al igual que el denodado esfuerzo realizado por el régimen peñista para minar su posicionamiento frente al electorado, utilizando todos los recursos habidos y por haber, dentro de los que juegan un papel muy importante los medios de comunicación nacionales. Como parte de una estrategia política de Estado, se ha capitalizado, inmoralmente, la grave situación por la que atraviesa el pueblo venezolano, equiparando a López Obrador como un potencial Nicolás Maduro, cuando la formación de uno y otro es, por origen político, radicalmente diferente; AMLO, con todo y su fobia hacia «la mafia del poder», es un hombre nacido políticamente en el sistema y jamás se irá en contra de éste, pues su «populismo» no va más allá de los programas sociales para la población. AMLO, es un líder, eso es indiscutible, un líder al que Peña, como el PRI, PAN y PRD, temen fundadamente, porque pese a ser un elemento del sistema y jugar con sus reglas, no forma parte del grupo élite con el que se han coludido no pocos intereses que hoy tienen en un nivel de violencia creciente al país. Por lo anterior y todo hace indicar de manera efectiva, existe una campaña nacional dirigida con el propósito de presentar a un AMLO que pierde posicionamiento y que, pese a encabezar las encuestas rumbo a 2018, va a la baja en la intención del voto ciudadano, empatado técnicamente con Margarita Zavala, algo que sólo lo creen en Bucareli y Los Pinos, por así convenir a sus intereses. Los intereses en juego son muchos y muy importantes, toda vez que el poder político determina el uso y destino de la riqueza nacional, de la que se nutren como modernos vampiros sociales los usufructuarios del sistema, al que no le importa cobrar más víctimas, mientras mantenga los niveles de beneficio que ha gozado a través de las diferentes etapas de su historia, por lo que ante el mínimo riesgo de perderlos, no duda en utilizar todos los recursos mediáticos, políticos, técnicos y presupuestales, para provocar el temor y la incertidumbre entre un electorado de por sí afectado en su sistema de vida. Si equiparar a AMLO con Nicolás Maduro, no deja de ser cuestionable, empatar técnicamente a Margarita Zavala en la intención del voto ciudadano con López Obrador, resulta no tan sólo grosero, cuanto irresponsable, considerando que la ex primera dama, si bien gozó de una buena imagen como tal, en su camino a una posible candidatura panista ha estado rodeada por desfortunadas declaraciones hacia el interior del partido, inapropiadas asesorías políticas que le llevaron amenazar con su salida del PAN, pero lo que todavía es peor, la cercanía y asesoramiento de FECAL, un apoyo que mejor le redituara de lejos y calladito. El camino aún es largo y conforme pase el tiempo se volverá más difícil y escabroso para AMLO, a quien los adversarios políticos lo convirtieron desde hace tiempo en el blanco de sus ataques, al grado de pretender una alianza partidista inédita para enfrentarlo en 2018. Todos contra AMLO. Todos Unidos Contra Andrés Manuel; frente al inevitable TUCAM, surge el cuestionamiento obligado ¿ le bajará tres rayitas El Peje en su posición de no buscar las alianzas con otros partidos, incluido el mismo PRD ? ¿ Qué es preferible. ahogarse sólo a la mitad del río, o buscar apoyo para cruzarlo ?. Usted ¿ qué opina ?
