Culto a la personalidad…
VIDA DIARIA
Rosa Elena Gonzalez
Quizá más que culto a la personalidad es vanidad, querer inmortalizarse o que el nombre de uno de los suyos quede grabado para la posteridad es lo que ha llevado a muchos gobernantes a imponer sus nombres o de sus familiares a edificios públicos o aceptar que en nomenclaturas y colonias igual se inscriban.
El problema es que luego, con el paso de los años, aparece que personajes de la política que tienen calles, colonias y hasta edificios con su nombre fueron declarados no gratos por su negro pasado, relaciones con entes del mal o actos de corrupción, es donde la gente pide que desaparezca su nombre hasta de nomenclaturas.
Ándele, como hoy sucede con las calles y colonias que llevan el nombre de TOMAS YARRINGTON y que se han visto expresiones de gente exigiendo se les cambie de nombre y apellido.
Como diría JUAN GABRIEL, pero qué necesidad, porque mejor antes de imponer un nombre a un espacio público no se busca a gente honorable, de preferencia no políticos
Por ejemplo quienes han hecho grandes aportes para la humanidad en la especialidad o acción en la que se desempeñaron es justo que se les reconozca, pero cada quien en su sitio.
Es decir, si fueron glorias deportivas pues es justo que un espacio donde se haga deporte lleve su nombre.
Quienes destacaron en el área cultural, científica o educativa pues los teatros, bibliotecas, centros de investigación o quizá hasta a escuelas puedan imponerles sus nombres.
Igual si fueron gobernantes comprometidos, queridos, que después de dejar el puesto no tengan señalamientos de corrupción pues puede ser justo que alguna calle o colonia lleve sus nombres como agradecimiento a sus buenas acciones.
Si tuvieron un papel preponderante partidista pues son los institutos políticos quienes deben darles un espacio donde se coloquen sus nombres o reposen sus estatuas de esos personajes.
Pero cuando se ponen nombre a diestra y siniestra de personajes de la política en espacios públicos, calles o colonias es culto a la personalidad, es rendir culto a la personalidad, vanidad.
Los edificios públicos no deben de llevar nombres de políticos o gobernantes, las calles son ciudadanas no de los políticos.
Todo viene a colación porque hay opiniones y sentimientos encontrados con respecto a que la estatua de RODOLFO TORRE CANTU sea removida del atrio central de la Secretaria de Salud.
Algunos priistas en las redes sociales manifestaron su inconformidad pero la verdad más que querer que la estatua siga donde está, que para acabar pronto casi nadie la ve, lo que quieren es llamar la atención y el asunto sirvió como excusa para hacer aparición.
La verdad más que indignación por parte de algunos priistas o la negación para que sea removida deben de ser coherentes, demostrar que les mueve el cariño y buscarle un lugar apropiado donde tenga más presencia.
Cierto, RODOLFO fue una persona que se ganó el cariño de mucha gente, pero siendo honestos no aportó nada a la medicina, a la ciencia médica, y cuando le arrebataron la vida ya no estaba al frente de esa dependencia, era candidato, por lo tanto el PRI debería hacer gestiones para que les sea donada la estatua y encontrarle un lugar frente al edificio del partido o en el atrio del mismo.
Seguramente el costo de la estatua de RODOLFO TORRE fue alto y no es justo que no tenga un lugar especial, su sitio ideal es el PRI estatal.
Hoy se cumplen 7 años de aquel día gris en que le arrebataron la vida a RODOLFO TORRE CANTU y reiteramos fue una persona que se ganó el corazón por su don de gente, unos le recordaran con cariño y otros con agradecimiento, en honor a su recuerdo los priistas deberían hacer la gestión para que su estatua de bronce tenga el lugar que le corresponde.
La estatua de RODOLFO debe estar en un lugar más visible, donde se le reconozca y sirva de inspiración, no debe estar oculto en una institución, antes de que otra cosa suceda los priistas, más que oponerse a que la estatua de TORRE CANTU sea removida del atrio de la Secretaria de Salud, lo que deben de hacer es la gestión para que les sea donada y pueda ser colocada con honores en el lugar que le corresponde, en el PRI.
¿Por qué tenerle en un lugar donde poca gente lo ve?, por supuesto que es mejor que este en un espacio a la vista de todos, que no le falten miradas, bullicio, sienta la caricia del sol, el roció del amanecer, se dibuje su silueta al atardecer y al caer la noche con la luna ilumine el recuerdo de su ser