RICARDO ANAYA SE MUERDE LA LENGUA EN SU CRUZADA CONTRA LA CORRUPCION (VIDEO)
Y SE MUERDE LA LENGUA RICARDO ANAYA
Ricardo Anaya ha logrado los reflectores nacionales con su cruzada contra la corrupción. Con ello ha alcanzado parte de su meta, la de obtener la aprobación de un sector de población que sí, efectivamente quiere un combate frontal contra ese mal, que tanto daño le ha causado al país y a la economía nacional. Pero, en su ímpetu jovial, Anaya Cortés se ha mordido la lengua, pues en los hechos, le ha mentido a la ciudadanía, y a su partido le ha dado una exhibida del tamaño de Rusia; más aún, ha dejado que el «lobo» entre al corral. Sin darse cuenta, eso quiero creer, incrustó en su nuevo gabinete al ex alcalde Renán Barrera Concha, acusado y sujeto a investigación por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) de cometer fraude con los recursos del ramo 33, durante su gestión al frente del Ayuntamiento de Mérida, de Yucatán del 2012 al 2015.
Todavía el pasado día 14 de septiembre el flamante presidente del CEN del PAN, Ricardo Anaya Cortés, le dijo a los mexicanos, en el marco de la celebración de los 76 años de vida del PAN: «Los panistas están de pie, vivos y en plena renovación, con prioridades claras: combatir la corrupción, sin importar en qué partido o empresas estén los corruptos». O sea.
Renán Barrera Concha está acusado por CORRUPCIÓN y FRAUDE por dar mal uso a los recursos del Ramo 33, por la Asociación «Acciones Líderes AC», y sujeto a la investigación de la Auditoría Superior de la Federación de número 1313, bajo el esquema de «Recursos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal y de las demarcaciones Territoriales del Distrito Federal» al Municipio de Mérida, Yucatán, y cuyo dictamen será dado a conocer, según afirma la propia institución, en el Informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2014 que próximamente se presentará a la Cámara de Diputados por conducto de la Comisión de Vigilancia de la ASF. El signante de esta confirmación es el Lic. Miguel Ángel Ibarra Gálvez, Director de Programación de la ASF.
En entrevista concedida al Programa de Televisión, Mi Punto de Vista, que conduzco, Arturo Cetina nos explicó que la denuncia se centra en el corredor de las comisarías de Mérida: Temozón Norte, Tixcuytun y Cholul, donde se ejercieron cerca de 100 millones de pesos, para construir «súper carreteras de cuatro carriles», en zonas donde supuestamente hay pobreza, pero que, en especial la de Temozón, incrementa la plusvalía de las residencias particulares de varios amigos del alcalde panista. En la adquisición de varios de los terrenos, aparecen nombres comprometedores para el alcalde, su hermano y el de varios amigos «especiales».
El asunto no termina allí nos expuso Arturo Bautista, ya que en la «súper carretera de 4 carriles» (terminada a medias) de Tixcuytún, hay varias contradicciones. La sustancial: Renán Barrera afirma que no entregó la obra carretera porque aún no se tiene la posesión de los terrenos por donde se construyó, aunque en el contrato firmado entre su ayuntamiento y la constructora, se determina que se debe tener la posesión legal total de los terrenos, en todo caso, nunca debió construir nada. Otra, en el reporte oficial contemplado en el Acta Entrega – Recepción y en el informe correspondiente al Ramo 33, se asegura que la obra sí está terminada, tanto la carpeta asfáltica como el alumbrado, cosa que no es así.
En Mérida, Yucatán, las comisarías de Cholul y de Temozón, en especial, han sido objeto de grandes inversiones inmobiliarias en los últimos años. A simple vista no se justifica la construcción de dichas carreteras con recursos del ramo 33, de hecho, éstas no llegan a la comisaría, sino que benefician las entradas, zonas donde se ubican grandes y hermosas residencias, que no albergan a los pobres, sino a los ricos.
El entonces alcalde de Mérida, Renán Barrera benefició a los ricos con dinero destinado a los pobres.
Arturo Cetina nos dice que la denuncia ante la ASF integra un análisis de los costos inflados, de los materiales y de los insumos usados para construir las «súper carreteras». Así como una relación de las mansiones que fueron beneficiadas por estas obras. Nos asegura que hay nombres de familiares y amigos especiales.
No estoy seguro de si Ricardo Anaya Cortés esté enterado de todo esto. Tal vez no, y por eso le damos el beneficio de la duda. Aunque, se ha visto mal de hecho, al no revisar con lupa la hoja de vida de esos a los que ha elegido para «renovar al PAN y darle luz combatiendo la corrupción».
Ricardo Anaya se vería muy mal si de repente le da por leer estas líneas y molestarse con quienes denunciamos esta anomalía y en consecuencia, mueve sus influencias para «lavar la cara» a su elegido, o bien para lavar la suya.
Aunque siendo sinceros, Ricardo Anaya tiene una oportunidad legal de lavar su error ya que según sus propias palabras, algunos nombramientos, están sujetos a la ratificación de la Comisión Permanente del Consejo Nacional, que se convocará en los próximos días, para dar cumplimiento a lo que establecen los Estatutos y Reglamentos del Partido.
¡Ahí está! Anaya tiene la solución inmediata, aunque la cosa no debe quedar en esa fase, sino en la otra que es llegar hasta las últimas consecuencias, que no es otra cosa que exigir a la Auditoría Superior de la Federación que llegue hasta el fondo y revise las cuentas de la administración de Renán Barrera Concha sin presiones, ni amenazas, ni chantajes políticas.
Acciones Líderes, es una asociación financiada de origen por la Unión Europea para auditar la aplicación de los recursos del ramo 33, relativos al combate a la pobreza, en Mérida, Yucatán. Mal haría Ricardo Anaya si se hace de la «vista gorda». Enviaría un mal mensaje a los mexicanos, porque el tema alcanza a los mexicanos, y al país entero.
Si bien es cierto que Renán Barrera tiene derecho a defenderse, mal haría Ricardo Anaya de protegerlo ante esta seria acusación que involucra a la ASF, institución que Anaya mismo ha ponderado como un ejemplo de combate frontal a la corrupción. Ricardo se vería bien si le revoca Renán su nombramiento como coordinador de alcaldes del PAN y le exige aclare sus cuentas y se sujete a la Ley, ahora que no tiene fuero legal.
Las palabras de Ricardo Anaya replican ruidosamente en la plaza pública «cuando los funcionarios públicos rinden cuentas, la probabilidad de corrupción se reduce, ya que los ciudadanos conocen con certeza el destino de los recursos públicos, es decir, en qué gastaron el dinero, a quién le pagaron, a quién y en cuánto compraron. Sin embargo, dijo, no basta únicamente con la transparencia, ya que el complemento necesario es el Sistema Nacional Anticorrupción, diseñado para prevenir, investigar y sancionar la corrupción de manera orgánica y eficaz».
Esperamos que Anaya no sea un mentiroso más, ni encubridor de corruptos y que no le otorgue un fuero político a Renán Barrera Concha, que debe rendir cuentas ante la ASF con la frente en alto, como asegura. Imaginemos qué consejos corruptos le daría Renán a los alcaldes panistas de México. ¡Cielos!
Anaya está a tiempo de corregir su falla