Otro lado de la moneda del país donde no pasa nada
Juegos de poder
México ya es una potencia turística mundial. Somos de los países que más recibe visitantes extranjeros del orbe. En 2015, a nivel mundial y de acuerdo con la Organización Mundial del Turismo, nuestro país ocupó el noveno lugar con respecto al número de llegadas de visitantes internacionales.
30 de Marzo de 2017
Ayer, en este espacio, comentaba varios temas de seguridad pública que años van, años vienen y no se resuelven. Esto es desesperante, sobre todo cuando se compara con asuntos donde se observan resultados positivos a lo largo del tiempo, donde se aprecia que sí es posible el éxito en México. Uno de esos temas es el turismo. Las cifras son impresionantes (los datos a continuación citados provienen de un documento publicado por el Inegi en septiembre de 2016 a propósito del Día Mundial del Turismo).
México ya es una potencia turística mundial. Somos de los países que más recibe visitantes extranjeros del orbe. En 2015, a nivel mundial y de acuerdo con la Organización Mundial del Turismo, nuestro país ocupó el noveno lugar con respecto al número de llegadas de visitantes internacionales con 32 millones 100 mil turistas. El número uno es Francia, con 84.5 millones, seguido de Estados Unidos, con 77.5; España (68.2), China (56.9), Italia (50.7), Turquía (39.5), Alemania (35) y Reino Unido (34.4). En llegada de turistas, México es el segundo lugar en el continente americano, tan sólo detrás de Estados Unidos, correspondiendo a Canadá y Brasil el tercer y cuarto lugares, respectivamente.
El turismo contribuye cada vez más a la economía mexicana. Este sector aporta 8.6% del Producto Interno Bruto (PIB). Ya no estamos tan lejos de un país eminentemente turístico como España, donde la aportación del sector al PIB es de 10.9 por ciento.
El turismo es una actividad económica eminentemente de servicios, pero también tiene un componente de producción de bienes (artesanías, por ejemplo). El PIB turístico en México se divide en 85% de servicios y 15% de bienes. Entre los principales servicios destacan el alojamiento, transporte de pasajeros, servicio en restaurantes, bares y centros nocturnos.
El turismo es un buen generador de empleos. Se estima que en 2014 había 2.3 millones de puestos de trabajo ocupados remunerados para llevar a cabo la producción de bienes y servicios turísticos, representando 5.8% del total de los empleos de la economía del país.
El turismo, en México, crece más que la economía nacional en su conjunto. Durante el primer trimestre del año 2016, la actividad del sector turismo aumentó en 4.1% con respecto al mismo trimestre de 2015. En relación al consumo turístico interior, durante el primer trimestre de 2016 se registró un crecimiento de 6.5% con respecto al mismo trimestre del año anterior.
El éxito del turismo en México se ha concentrado mucho en los destinos de playa. Tres regiones han sido las más beneficiadas con el desarrollo del sector: el Caribe (Cancún y la Riviera Maya), Los Cabos y Vallarta, junto con la Riviera Nayarit. En estos destinos se encuentran hoteles, restaurantes, spas y campos de golf de clase mundial con un servicio impecable.
No obstante, México tiene mucho más que ofrecer a los turistas nacionales y extranjeros. De acuerdo al Atlas Turístico de México, en el país hay por lo menos 80 destinos con atractivo turístico que ofrecen inigualables experiencias naturales, arquitectónicas, gastronómicas y culturales. Es decir, el país todavía tiene mucho hacia donde crecer en materia turística. La reciente depreciación del peso mexicano es una extraordinaria noticia para este sector. Los márgenes se incrementarán y, con ello, la posibilidad de aumentar las inversiones. Los gobiernos (federal, estatales y municipales) tienen un papel muy importante que jugar en el desarrollo y regulación del sector. Deben, sobre todo, cuidar al máximo la seguridad pública en los destinos turísticos. Acapulco perdió su lustre en el extranjero por la violencia generada debido al crimen organizado. Desgraciadamente, no ha podido recuperarse y hoy vive fundamentalmente del turismo nacional. Esto no puede ocurrir en las playas de Quintana Roo, Baja California Sur, Jalisco y Nayarit, donde han ocurrido, en meses recientes, ciertos episodios de violencia.
México, sin duda, debe cuidar el tesoro del turismo. Se trata de una historia de éxito. Del otro lado de la moneda del país donde no pasa nada.
Twitter: @leozuckermann