Por: Mauricio Fernández Díaz
100 millones de deuda en el primer año como Sub Tesorero de Juvenal Hernández
280 Millones de Deuda en 10 meses como Tesorero de Héctor Villarreal
A espaldas de la alcaldesa y la tesorera realiza movimientos financieros en contubernio con el “Superasesor” JOSE ALBERTO GUZMAN RIVERA
Auditoria Superior y Congreso advierten “No pasará ninguna cuenta que no este limpia”
Roberto Rocha Nava es un Contador formado a la vieja usanza priista, de aquellos que acostumbran maquillar cifras para ocultar desvíos de recursos y tranzas cometidas por los Ayuntamientos para quienes prestan sus servicios.
Su escuela, aprendida de un experto en esas artes, el Contador Fernando Rodríguez, (hoy millonario retirado), es en estos tiempos de cambio que vivimos completamente obsoleta; Sin embargo, la sigue practicando creando un caos financiero en la tesorería de Altamira que amenaza ya desde ahora con seguir en el Congreso los pasos del ex alcalde Armando López, quien está siendo investigado por la Contraloría y la Auditoria Superior del Estado debido a que simplemente no pueden justificar en que gastaron los muchos millones de pesos que no están respaldados.
Roberto Rocha no es una mala persona; inclusive puede ser un buen contador, solo que al viejo estilo priista en donde tapar desfalcos, cubrir saqueos, maquillar cifras, desviar fondos y otras artes contables eran aplicadas sin escrúpulos por los contadores y entre mejor supieran como esconder la enorme corrupción que realizaba un presidente, mejor cotizado y pagado era el contador.
Por otra parte en mucho les ayudaba que el Congreso y el Auditor Superior fueran miembros de la mafia priista, ya que aun y cuando públicamente se conocieran las enormes deudas no justificadas heredadas de un Gobierno a otro, siempre contaban con que la Auditoria y el Congreso aprobarían las cuentas, dándole el carácter de legal a lo que todos sabían había sido un brutal saqueo.
Hoy con la “jubilación anticipada” de Miguel Salman, la Auditoria Superior del Estado quedará en manos de un panista con la orden clara y contundente del Gobernador de no dejar pasar ninguna cuenta pública que no esté bien sustentada, y el Congreso con mayoría panista también debe hacer lo propio para evitar que algunos municipios les metan gol con cuentas mochas.
Ya lo mencionó el Diputado Ciro Hernández Arteaga al expresar que ningún Ayuntamiento, ningún organismo descentralizado estaría por encima de la ley; Esa advertencia venida nada menos de un miembro del Congreso perteneciente al Comité de Auditoria, y representante popular del municipio de Altamira no puede echarse en saco roto.
Por cierto, recordamos que cuando fue presidente Juvenal Hernández Llanos su primer tesorero fue un Doctor de nombre Filiberto (que por obvias razones nada sabía de finanzas) el Sub Tesorero era precisamente Roberto Rocha; En el primer año de la Administración la deuda alcanzó la cifra de 100 MILLONES DE PESOS ( 8 millones 333 mil pesos gastados en nadie sabe que por mes). Ante esto Juvenal debió remover de su puesto al Doctor y designó al hoy diputado Ciro Hernández Arteaga.
Aquí la irresponsabilidad del Sub tesorero es manifiesta, así como la complicidad de quienes si sabían de números y tenían experiencia o sea, el Contador Roberto Rocha y su jefe Fernando Rodríguez quienes pensaron que sacando de la jugada al Dr. Filiberto el puesto recaería en la figura del actual asesor de Finanzas del Ayuntamiento Roberto Rocha. Afortunadamente para Altamira no fue así; El designado fue Ciro Hernández Arteaga.
La historia profesional de Roberto Rocha está marcada por estos hechos, que son apenas la punta visible del iceberg.
Otra negra mancha en su expediente fue en la Administración de Héctor Villarreal Martínez; Ciro Hernández Arteaga era el tesorero, cargo al que renuncia el 10 de Marzo del 2010 para ir en la planilla de Pedro Carrillo como Síndico, quedando en su lugar como Tesorero Roberto Rocha quien fungía como Sub tesorero, mismo que recibe la tesorería con una deuda manejable de aproximadamente 38 millones; Roberto Rocha termina la administración con UNA DEUDA DE 280 Millones de pesos.
Pedro Carrillo durante toda su gestión se negó a pagarla debido a que la Auditoria le había realizado múltiples observaciones que Roberto Rocha jamás pudo resolver ni sustentar.
Tuvo que llegar Armando López a la presidencia para, mediante un especial favor que le pidió Héctor Villarreal, se contratara a un despacho de contadores del Congreso para poder “cuadrar” las cuentas y que fueran aprobadas. Rocha jamás dio la cara y mucho menos aclaro en que se gastaron los casi 200 millones de pesos de deuda pública.
¿Usted contrataría a una persona con estos antecedentes laborales para que le administrara su dinero?
La Administración actual corre un grave riesgo al dejar en manos de un personaje con estas características la hacienda municipal, el dinero de todos los altamirenses, ya que si bien existe una tesorera y un sub tesorero, Roberto Rocha como “asesor” tiene el poder y la influencia para incidir en las decisiones que toma la alcaldesa, a quien por cierto ya le ha ocultado varias operaciones que ha realizado a sus espadas en combinación con el Coordinador de la Presidencia, JOSE ALBERTO GUZMAN RIVERA.
La bomba está activada, y les puede estallar en la cara en cualquier momento si no le ponen rápido remedio.
