LA MAFIA DEL TRANSPORTE Y LOS VIENTOS DE CAMBIO
Por: Mauricio Fernández Díaz
El Gobierno y la exigencia de aumento al pasaje, oportunidad para demostrar de que esta hecho el Gabinete cabecista
Aprovechar la oportunidad para meter orden en las mafias que controlan el transporte, prioridad antes de concederles aumento.
Políticos priistas y ex funcionarios dueños de flotillas de más de 200 taxis que rentan en 350 y 400 pesos diarios
Ex Gobernadores, líderes y ex funcionarios dueños de las cooperativas de Concesionarios del transporte público.
La CHATARRA que llaman microbuses no deben seguir circulando; el pueblo merece transporte digno y moderno, no ataúdes rodantes
William Knight, Sub Secretario del Transporte en Tamaulipas y Cesar Augusto Verastegui Ostos, Secretario General de Gobierno tienen ante sí el primer gran reto de la administración cabecista.
Los concesionarios del transporte público están presionando fuertemente para que les autoricen subir las tarifas, como consecuencia del gasolinazo implementado por la Secretaria de Hacienda y Crédito Público por instrucciones de Peña Nieto.
Se ve inminente la autorización, con el costo económico para la población y político para el Gobierno panista que podrá aducir en su defensa no haber sido el causante, más el aumento a los pasajes urbanos tendrá consecuencias directas tanto en el bolsillo como en el ánimo de los tamaulipecos que esperan ilusionados que el Gobernador de una respuesta negativa a los concesionarios defendiendo así la economía familiar tan golpeada con el gasolinazo y las alzas en cascada que está provocando.
Aunque no se ve ni es fácil, en lo particular vemos esta situación como una oportunidad única que se le presenta a Cabeza de Vaca y su Gabinete para desmantelar esa mafia que se ha apoderado del transporte público en el estado, así como para poner fin a los cacicazgos regionales que florecieron en este lucrativo negocio, donde existen políticos y funcionarios dueños de cientos de concesiones tanto de ruta como de taxis, mismas que rentan a precios que oscilan entre los 250 y 400 pesos diarios.
Tan solo en la zona conurbada un ex presidente municipal, ex diputado y actual delegado del PRI en la zona es dueño de aproximadamente 200 placas, siendo conservadores en el número, así como un actual Delegado Federal en el área de Salud, ex funcionario a las órdenes de Eugenio Hernández quien posee una flotilla de aproximadamente 300 taxis; También un ex líder porril de la UAT ahora millonarios posee centenas de concesiones, siendo también socios de las cooperativas de autotransporte.
Durante muchísimo tiempo se ha luchado para que las placas para poder prestar este servicio dejen de ser un jugoso negocio para los funcionarios del transporte, ya que son entregadas como botín político (diputados, presidentes, lideres etc) o vendidas por los Titulares del Transporte en precios que superan los 200 mil pesos cuando la ley es clara al ordenar que deben ser gratuitas siempre y cuando la persona demuestre que en realidad trabaja en ese ramo sin que se haya podido lograr debido a la mafia que maneja el transporte, misma que se presume aliada al Crimen Organizado cobrando cuotas o pago de piso a las bases y cooperativas que van desde 200 a los taxis hasta 1,200 por camión diariamente, por lo que quebrar esta alianza debe ser prioridad si en realidad se quiere llegar a la modernización de este ramo en Tamaulipas.
Si los concesionarios del transporte quieren que se les autorice un aumento, el gobierno debe exigirles primero que presten un servicio digno, eficiente y moderno, ya que las condiciones en que se encuentran las unidades son lastimosas, quedando la mayoría de ellas etiquetadas COMO CHATARRA.
Los gobiernos priistas dejaron que creciera esta mafia debido a que se beneficiaban económica y políticamente; durante los acarreos a mítines o manifestaciones, los concesionarios daban todas las facilidades al gobierno si estas eran a favor o bien sin más argumento no las alquilaban o ponían altos precios si eran en contra o para alguna protesta en contra.
Autorizar 2 pesos no parece mucho cuando ganas 20, 30 mil o más y tienes carro y vales de gasolina, como en el caso de los diputados y senadores, presidentes municipales, regidores y síndicos, pero es una puñalada para el pueblo que apenas puede aspirar a ganar 100 diarios, aunque el mínimo habla de 84.04 pesos diarios aproximadamente, y que en la mayoría de las ocasiones debe tomar dos microbuses destartalados, contaminantes, que corren como locos y con choferes maleducados y leperos; hoy en estos casos las amas de casa o empleados usan 36 de los 80 pesos solo en trasladarse al trabajo. Eso sin contar los de los hijos que van a la escuela y el del marido… ¿Qué les queda?
Por eso decimos que tanto el Sub Secretario William Knight como Cesar Augusto Verastegui tienen ante sí un enorme reto del cual con valor, firmeza y sobre todo pensando en el pueblo pueden superar y sacarle ventaja.
Autorizar el aumento sin aprovechar para realizar cambios de fondo sería continuar con los viejos vicios dejados por décadas de corrupción, sin corresponder a la confianza en un verdadero cambio que les brindo el pueblo tamaulipeco.
¿No podría Cabeza de Vaca con todos los millones que se ha ahorrado al despedir personal, no cubrir las vacantes y aun así seguir emitiendo los cheques poner rutas que cobren lo mínimo para darle mantenimiento a las unidades?
Creemos que muchas cosas se pueden hacer, con voluntad, inteligencia pero sobre todo mucho amor por el pueblo.
Es, como dijimos, la primera gran prueba para la nueva administración.
Veremos de que está hecha.
PD…¿Y NUESTROS DIPUTADOS LOCALES DONDE ESTAN QUE NO HAN DADO LA CARA PARA DEFENDERNOS DE LOS PRETENDIDOS AUMENTOS?