Maremágnum
Mario Vargas Suárez
Para el mundo animal el cambio de piel en algunos reptiles, el plumaje en algunas aves o las escamas en cierta clases de peses y tortugas, es indispensable en su propia evolución.
Los científicos aseguran que el hombre no es tanto que cambie de piel, escama o plumaje. Más bien el ser humano va renovando las células muertas de la piel y con el baño diario no nos percatamos de ello.
El cambio de piel es necesario para la renovación orgánica.
Si orgánicamente el cambio de piel tiene la finalidad de una evolución, de un perfeccionamiento, de una marcha, entonces podemos decir que este cambio también se puede dar en el contexto ideológico.
Viene a colación lo del cambio de piel porque los legisladores del Partido de la Revolución Democrática (PRD) recientemente presentaron ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, una iniciativa para reformar Ley General del Servicio Profesional Docente.
Tema muy candente que no solo ha provocado trastornos citadinos con las marchas, plantones, cierre parcial o total de carreteras y hasta aeropuertos que han hecho los maestros de la CNTE.
Los amarillos del PRD tienen la intención de impulsar una propuesta de solución al conflicto magisterial que desde la aparición de la reforma educativa peñista, ha radicalizado acciones de los maestros, sobre todo en Oaxaca, Guerrero, Michoacán y Chiapas, con el peligro de extensión a otras entidades, incluyendo Tamaulipas.
La iniciativa de Ley fue presentada a la Comisión por el coordinador ‘amarillo’ en San Lázaro, Francisco Martínez Neri, y en ella se propone modificar el párrafo IV del artículo 53 de la Ley General del Servicio Profesional Docente.
La idea central es para que los profesores reprobados hasta en tres ocasiones en la evaluación, en lugar de ser separados del aula de clases, sean cambiados de funciones, sin que ello signifique el desempeño de funciones vinculadas a la docencia.
Es decir, intentar borrar de la mente de los maestros de grupo, la idea de que se quedarán sin trabajo, simplemente saldrán del aula, desaparecerán del mundo de los infantes como profesores, para desempeñar otras funciones.
La iniciativa ‘amarilla’ también propone adicionar al párrafo V, un texto que asegure a los maestros con nombramiento docente, puedan solicitar su incorporación a un programa de retiro voluntario.
La iniciativa presentada a la Comisión Permanente reconoce que la bancada del PRD, tiene la convicción de impulsar, desde el Congreso de la Unión, una propuesta de solución al conflicto magisterial.
En el mismo documento consideran los legisladores ‘amarillos’ que al ser representantes sociales, deben atender la problemática magisterial como parte de un contexto que auxilia a la formación del ciudadano del mañana.
En la exposición de motivos la iniciativa de Ley reconoce tiene alcances significativos en ámbito laboral y administrativo, pero con dos mecanismos para procesar el resultado de una evaluación.
“El primero, es el punitivo, el cual es utilizado por el Gobierno Federal, debido a que, si el maestro obtiene resultados insuficientes, es removido.”
También se lee “…que pretende mejorar al docente evaluado, consiste en implementar un proceso de capacitación y aprendizaje con la finalidad de mejorar sus habilidades y desempeño en el salón de clases”.
La nota publicada en el periódico El Universal, señala que la fracción perredista reconoce que la reforma educativa ha generado encono entre los maestros y el gobierno “…ha llevado al conflicto y se requiere, con prudencia, mantener los principios necesarios para mejorar el servicio docente y a la vez, establecer una alternativa que le de viabilidad a los cambios.”
El cambio de piel es natural, lo que puede hacer posible la apertura para nuevas ideas a nuevas situaciones. Todo cambia, todo evoluciona y si ahora los maestros están rechazando la reforma, se puede mejorar, mientras haya voluntad.
