Tiempo de opinar
Raúl Hernández Moreno
Febrero 01
Los aspirantes a candidatos independientes están en la fase de recolección de firmas que les permitan obtener la calidad de candidatos.
En el caso de los que buscan la presidencia municipal, están obligados a recabar 300 firmas al día, con sus respectivas copias de la credencial de elector.
¿Quiénes lograrán reunir las firmas que les exige la ley? El tiempo lo dirá, aunque de los cuatro autorizados el más seguro es Eduardo Longoria, porque el equipo que lo apoya es el mismo que el año pasado le reunió más de 9 mil 100 firmas a Diana Chavira para que pudiera ser candidata independiente a diputada federal. En ese proceso le ley requería de 6 mil firmas.
Por cierto que pocos recuerdan que en el 2001, Eduardo Longoria participó en el proceso interno del Partido Acción Nacional para seleccionar al candidato a la presidencia municipal. En esa ocasión además de Longoria participaron Héctor Peña y Heriberto Cantú y éste último ganó la elección. Es el último proceso del PAN en el que se permitió a los militantes escoger a su candidato de manera directa, pues a partir de entonces, todos los demás candidatos fueron resultado de una imposición del Comité Ejecutivo Nacional.
En su momento, Arturo Sanmiguel, Hugo Galindo, Salvador Rosas y Carlos Canturosas, fueron impuestos por el CEN del PAN. El PAN no tiene vocación democrática, aunque sus dirigentes se llenan la boca, diciendo lo contrario.
Y a propósito del PAN, el domingo se concreto el registro de Francisco García Cabeza de Vaca como pre-candidato único a la gubernatura de Tamaulipas. Con él estuvieron personajes como Laura Zarate, Enrique Rivas, Carlos de Anda, Rafael Pedraza, Ernesto Ferrara, todos los cuales, hasta hace una semana, se negaban a saludarlo, cada vez que venía a Nuevo Laredo.
No solo le negaban el saludo, en septiembre último, Rafael Pedraza públicamente dijo que no lo necesitaban: “En Nuevo Laredo no necesitamos al senador García, somos un Municipio ganador y en el 2016 vamos a volver a ganar” y poco falto que dijera que no lo quería tener enfrente, porque lo echaría a patadas.
Los tiempos han cambiado. Hoy Pedraza si necesita a Cabeza de Vaca.
A diferencia de la pueril postura que durante dos años asumió un grupo panista contra Cabeza de Vaca, este siempre se ha mostrado conciliador y ha promovido una política incluyente en la que ha dicho que todos caben.
Claro, no es lo mismo apoyar un proyecto antes de definirse una candidatura, que cuando está decidida. Cabeza de Vaca sabe quiénes son sus amigos y aliados de verdad.
Cuando había una alianza en su contra, con Cabeza de Vaca se la jugaron personajes como Rodolfo Martínez Camacho, Luis Talamás Cárdenas, Luis Moreno Sesma, Salvador Rosas, Oscar Villa y no se digan, Rubén Cárdenas, Eliseo Raúl Huerta, Claudia Pérez, Andrés Ortega.
Enrique Garza también confió en Cabeza de Vaca, a pesar de estar afiliado al PRI. Hubo también unos pocos medios, que ante el acoso y la censura emanada del gobierno municipal, se atrevieron a darle espacio al hoy candidato del PAN, practicando la libertad de expresión.
