PRI DE TAMAULIPAS: ¿Y POR QUÉ NO CONSULTA A LA BASE?
Hipódromo Político
Por: Carlos Gerardo Cortés García
Es la pregunta que muchos priistas se hacen después de la reunión del Consejo Político Estatal del PRI del pasado sábado, reunión encabezada por el dirigente nacional del PRI, el sonorense Manlio Fabio Beltrones Rivera y donde se aprobó el método de selección del candidato a la Gubernatura de Tamaulipas: la convención de delegados.
¿Por qué Convención de Delegados y no Consulta a la Base? ¿No sería más parejo el piso para todos los que aspiran a llevarse la candidatura tricolor al Gobierno del Estado? Y es que mire Usted, si tanto nos cuesta a los contribuyentes mexicanos el sistema electoral que busca proteger a la democracia mexicana, a través del INE, porque no abrir los métodos democráticos de selección de candidatos desde el interior de los propios partidos políticos. ¿Habrá temores? ¿O quizás habrá miedo a la competencia? O aún peor, ¿el método lleva dedicatoria? Porque hay quienes aseguran que el alcalde de Ciudad Victoria tiene todo el apoyo y más del Gobierno del Estado. ¿La Convención de Delegados no es favorecer al favorito del Palacio de Gobierno desfavoreciendo a los otros aspirantes?
Es pues importante que los partidos políticos, en este caso el PRI, pavimente piso parejo para que todos los aspirantes a la candidatura del Gobierno del Estado, participen en una selección interna esperando que quien sea electo al interior salga a las calles con la legitimidad necesaria, con el liderazgo requerido, con la dignidad al frente para llamar al voto y la participación ciudadana. De otra forma, de otra manera, será muy complicado para los partidos políticos y para los candidatos llamar al voto y a la participación ciudadana.
Dice una máxima que en política quien gana no gana todo y quien pierde no pierde todo. Ello significa que quien logre la candidatura a gobernador de Tamaulipas tendrá la obligación de cuidar que aquellos adversarios que no llegaron a ser el candidato, tengan la seguridad de que algo habrán ganado: tal vez una diputación o talvez una alcaldía o tal vez contratos.
¿Qué es lo que el PRI debe remontar? Un escenario electoral, político y social muy complicado, aderezado por las difíciles condiciones económicas y de seguridad y una crisis al interior de los partidos políticos compleja, así como la cada vez más intensa competencia electoral.
En lo personal no me queda la menor de las dudas de que Francisco García Cabeza de Vaca será el candidato del PAN al Gobierno de Tamaulipas. Y en ese escenario el tricolor debe partir de la premisa de que Cabeza de Vaca logró, cuando fue candidato al Senado en el 2012, 550 mil votos en números cerrados, en una elección que como Usted recordará Enrique Peña Nieto perdió en Tamaulipas.
Para que Usted entienda esta comparación, debo comentarle que en 1998 Tomás Yárrington Ruvalcaba ganó la gubernatura de Tamaulipas con 485 mil votos; en 2004 Eugenio Hernández Flores triunfó con 622 mil votos y Rodolfo Torre Cantú logró el triunfo priísta en 2010 con 679 mil votos. Es decir, Cabeza de Vaca lleva en las alforjas ya, de manera segura, los 550 mil votos que lo llevaron al Senado. Entonces, sólo deberá trabajar por los 130 mil que le faltan para alcanzar la votación que logró el Dr. Rodolfo Torre Cantú, en otras, hay que decirlo, condiciones políticas y económicas en el país y en el estado.
Sin embargo, las circunstancias de la elección de 2016 no serán, ni por mucho, parecidas a la de ninguna de las tres elecciones anteriores, lo que podría poner en serios aprietos a los priístas, contra un Cabeza de Vaca que está imparable.
Y reitero que las circunstancias del país no son las mismas: adicional a la crisis que ha lastimado la economía de los mexicanos, hoy ocupa espacios importantes en los medios de comunicación la lucha por consolidar las reformas del Gobierno Federal, las que han conseguido que sectores, como el magisterio, están molestos PRI con el Gobierno Federal.
Insisto, no me atrevería a dar un pronóstico de la elección del próximo 5 de junio, pero lo que si me atrevo es a ofrecerle desde ahora el escenario que permite observar en Tamaulipas condiciones reales de alternancia, lo que significa que Francisco García Cabeza de Vaca podría despachar a partir del próximo 1 de octubre de 2016 en la oficina principal del tercer piso del 15 Hidalgo de Ciudad Victoria y que en esa ola electoral también candidatos varias alcaldías del estado y a diputados locales de oposición, puedan montarse en esa ola azul. Tiempo al tiempo, ya veremos.
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