NOTICIERO
Historia en la vida política municipal::: Similitud conla fábula del sapo y la luciérnaga::: Si hay remedio para las inundaciones::: Baltazar sentó las bases::: Diseñó el proyecto del Arroyo del Tigre::: Se lo autorizó la Conagua::: Consiguio los recursos federales::: Su sucesor, Erick Silva lo frenó::: No quiso pagar el proyecto ejecutivo::: Miles de familias siguen padeciendo las consecuencias de la pugna política::: Por querer acabar con la imagen de Baltazar, provoca graves daños a la población::: Se ignoran las razones
HECTOR MIGUEL CHAVEZ
hectormiguelchavez@gmail.com
H. Matamoros, Tam.- Esta es una historia de mucha actualidad de la vida política municipal y podría haber quienes le encuentren alguna semejanza con la fábula del sapo y la luciérnaga.
Tiene un principio feliz pero un final frustrante y desastroso para miles de familias, víctimas inocentes de las siniestras acciones.
En la administración de Baltazar Hinojosa Ochoa se registraron inundaciones muy fuertes, como ocurrió en otros trienios.
Decidido a atacar de fondo el problema, se encontró con que era prácticamente imposible resolverlo definitivamente, pero los especialistas de la Junta de Aguas con amplia experiencia, le dijeron que se podían evitar en gran medida las inundaciones consiguiendo que el agua fluyera con rapidez fuera de la ciudad.
Y pusieron manos a la obra. Baltazar ordenó el estudio técnico que demostró la viabilidad de la idea. Se hizo entonces el proyecto del Arroyo del Tigre que contemplaba el desazolve y la desincorporación de canales con lo que se ponía fin a los nudos hidráulicos que hay en el trayecto de la ciudad al Arroyo del Tigre, La Palangana y el poblado de Los Cuervos.
Esto permitiría que el agua fuera desalojada con rapidez por mucho que lloviera, y claro, obviamente que el sistema de bombeo y rebombeo operara con toda normalidad.
De inmediato se iniciaron las gestiones ante la Comisión Nacional del Agua y el proyecto fue autorizado por la Conagua.
Esta autorización se dio al final de la administración cuando Baltazar ya estaba a punto de entregar.
Baltazar Hinojosa fue electo diputado federal y con tal embestidura consiguió que el Gobierno Federal autorizara los recursos necesarios para hacer las obras que habían sido solicitadas, pero se puso como condición la presentación de un proyecto ejecutivo, como ocurre con toda obra importante.
El proyecto debía ser realizado por una empresa profesional, certificada por la propia Conagua para esta clase de trabajos, que son fundamentales para que la obra sea un éxito, pues la inversión era de aproximadamente 200 millones de pesos.
El sucesor de Baltazar Hinojosa fue Erick Silva Santos, que ya como presidente municipal le correspondió poner el punto final para hacer realidad la obra, que beneficiaría a miles de personas que viven en las colonias de la periferia y en las zonas inundables del centro de la ciudad.
Y Erick mandó hacer el proyecto ejecutivo a una empresa de Valle Hermoso que no estaba certificada para esa clase de trabajos, por lo que su documento estuvo incompleto y fue rechazado por la Conagua.
Los profesionales de la Junta de Aguas se dieron a la tarea de buscar una empresa certificada, especializada en proyectos ejecutivos que debía hacerlo en poco menos de un mes porque se estaba venciendo el plazo otorgado para ejercer el presupuesto autorizado.
Esta empresa era de Monterrey y cobraba honorarios por 10 millones de pesos, que debían ser pagados en un 50 por ciento por el ayuntamiento y el otro 50 por ciento por la Conagua.
Pero el presidente municipal, Erick Silva Santos se negó a aportar esa cantidad y los recursos autorizados se cancelaron y se destinaron para otro municipio del país.
Como resultado de esa negativa de la Presidencia Municipal, el problema de las inundaciones se ha ido agudizando año tras año, y los más afectados han sido los residentes de las colonias como Los Sauces y otras muchas que han perdido su patrimonio y han sufrido multitud de trastornos porque las inundaciones han sido cada vez peores.
Esta fue solo una de tantas acciones que se realizaron durante el trienio de Silva Santos, especialmente dedicadas a destruir la obra de su antecesor, Baltazar Hinojosa Ochoa.
Públicamente se desconoce qué clase de conflictos haya entre estos dos políticos, pero lo que sí es real es que las consecuencias las sigue pagando la sociedad.
Hace poco más de un mes, en una de las últimas inundaciones cuando la alcaldesa anduvo repartiendo despensas con el agua hasta la cintura, el ex alcalde Erick Silva Santos fue a tomarse la foto al fraccionamiento Los Sauces y luego subió la foto a su página de facebook.
Cabe mencionar que las administraciones de Alfonso Sánchez y Leticia Salazar ni siquiera mencionaron nuevamente el proyecto del Arroyo del Tigre.
