Permite que su secretaria resuelva, disuelva y revuelva a su antojo sin solucionar nada, mientras él se la campechanea en sus asuntos personales
Por/Gilberto Zapata/Reportero
Tampico Tamaulipas.- Los Tampiqueños muchas veces se han preguntado en manos de quien están, ya que sus autoridades municipales en vez de apoyar y resolver las necesidades más apremiantes, se la pasan dormidos en sus laureles, máxime que ya les quedan menos días para seguir viviendo del presupuesto, por lo que se han dispuesto a ya no resolver nada y hacer pasar corajes a todo aquel que acuda al palacio municipal, tal como sucedió en la secretaria del Ayuntamiento, en la que el secretario Juan Carlos Ley Fong, necesita “guajes para nadar”.
Lo anterior se deriva de una queja presentada a esta redacción, por parte de la licenciada Esther Lozano Hernández, presidenta de la Fundación Para la Reconstrucción de México (FUREMEX), quien menciona que el pasado 17 de septiembre, acudió a las oficinas de la secretaria del Ayuntamiento de Tampico, a solicitar un permiso para instalarse en la vía publica y pedir el apoyo y donación de los Tampiqueños, de productos y ropa de temporada invernal, mismas que serían donadas a personas de escasos recursos de la zona conurbada, pero principalmente del municipio de Tampico.
“En el oficio presentado a la secretaria de Juan Carlos Ley Fong, de nombre Martha Isela Huerta Uvalle, me menciono que no era en ese departamento el permiso y que lo llevara pero a nombre de Agustín Muñoz León, subsecretario de ingresos, y este a su vez, se lo volvió a enviar a Martha Isela Huerta Uvalle, quien perdió dicho oficio y jamás resolvió nada, cabe mencionar que jamás vi de manera personal al licenciado Ley Fong, todo lo resolvió su secretaria, si es que se le puede poner ese calificativo, ya que perdió los documentos y jamás me supo dar una respuesta certera de si se me podía otorgar el permiso o no” explico la presidenta de FUREMEX.
Agrega Lozano Hernández, que quienes acuden a la secretaria del Ayuntamiento tienen que ir armados de mucha paciencia, para poder soportar los malos tratos de parte de la secretaria, la cual al parecer está autorizada para hacer, deshacer y revolver todo en ese departamento, mientras su jefe cómodamente disfruta de la vida disipada que le da ese cargo, el cual por cierto ya le queda menos tiempo y el pueblo y la ciudadanía quienes pagan su sueldo, no perdonan.
Finalmente, Esther Lozano Hernández, refirió que las buenas intenciones de apoyar las necesidades de las familias de escasos recursos, quedara solo en eso, y se hace muchas conjeturas al respecto sobre el porqué la negativa y prepotencia de quienes tienen la oportunidad de servir al municipio donde viven y radican en ese corto periodo de tiempo, y en lugar de aprovecharlo para hacer el bien, sacan sus amarguras y problemas personales en contra de quienes los llevaron a ese lugar y les paga su sueldo durante ese corto periodo de tiempo.
