Por: Mauricio Fernandez Diaz
LA OTRA CARA DEL SEGUNDO INFORME
Altamira Tam.-En medio de sonados escándalos que involucran amoríos extramaritales, destrucción del núcleo familiar, construcción de casas para su amante y parientes, compra de mansiones con valor de 20 millones de pesos, riqueza inexplicable, contratos de obras amañados a favor de su padrino político, quiebra técnica en las finanzas del Ayuntamiento, desvío de recursos, despido de 600 trabajadores, rebajas en los sueldos de funcionarios, distanciamiento con los grupos políticos por traiciones y tráfico de influencias a favor de su jefe político y hasta presuntos vínculos con el Crimen Organizado, Armando López Flores presidente de Altamira llega en un estado sumamente crítico a su segundo año de gobierno.
LOS AMORES DE ARMANDO LOPEZ PAGADOS CON DINERO DEL PUEBLO
Para la mayoría de los personajes consultados en esta investigación periodística, Armando López Flores extravió el camino, se desubico; en una palabra, “perdió el piso” como lo afirma uno de sus más cercanos colaboradores quien al igual que los otros pidió anonimato por temor a las represalias que seguramente habría en caso de saberse las fuentes informativas.
Refieren que en plena campaña por la presidencia, la cual gano gracias al apoyo del ex presidente de Altamira Javier Gil, primo del ex gobernador Eugenio Hernández Flores (Hoy investigado por la DEA por lavado de dinero y asociación con el Crimen Organizado) Armando Flores se vio afectado emocionalmente al involucrarse con una jovencita, a quien nombró su secretaria particular para posteriormente imponerla como Secretaria General del PRI en Altamira; Actualmente la dama fue de nuevo requerida por el alcalde (no se sabe exactamente en qué función) pero si muy cerca del edil, cobrando jugosos sueldos y muy generosas compensaciones.
Esto ocasionó la destrucción del núcleo familiar y el distanciamiento de Armando López con esposa e hijas; Afirman que la actual presidenta del DIF ya le requirió el divorció, mismo que, por consideraciones políticas y para evitar el escándalo público se hará efectivo una vez que Armando termine su gestión al frente del Ayuntamiento.
Es muy delgada la línea que separa lo privado de lo público cuando se ejerce un cargo de elección popular; sin embargo, el hecho de utilizar recursos del erario para mantener o brindarle propiedades o ganancias a su amante sin duda pone al sujeto y a su familia dentro del escrutinio y los reflectores públicos.
Y sin duda este es el caso que nos ocupa; De acuerdo a nuestros informantes, el presidente está construyendo en el área de una manzana, casas para su amante y familiares; En una inspección ocular al sitio pudimos constatar que afuera de la construcción se encontraban vehículos con logos del Ayuntamiento y trabajadores del mismo; o sea, Armando López utiliza dinero, material y trabajadores del Ayuntamiento para beneficiarse y beneficiar a sus seres queridos, algo que en términos legales se denomina peculado y debe ser investigado por la contraloría municipal y estatal y en su caso, de ser comprobado, castigado con cárcel (peculado:
disposición que hace un funcionario de los bienes materiales para el desempeño de sus funciones para sí o para otros. El peculado solo puede ser cometido por un funcionario con bienes dispuestos bajo su cuidado. Es un delito consistente en la apropiación indebida del dinero perteneciente al Estado por parte de las personas que se encargan de su control y custodia.).
LAS MASIONES DEL ALCALDE; RIQUEZA INEXPLICABLE.
Armando López proviene de eso que se ha dado en llamar “la cultura del esfuerzo”; toda su vida fue un asalariado, funcionario de medio pelo bajo las órdenes de sus padrinos políticos. Primero Sergio Carrillo, posteriormente Javier Gil.
Con el apoyo de las relaciones políticas realizadas en sus diferentes cargos, logró comprar dos camiones materialistas de segunda mano, mismos que rentaba a sus amigos que se encontraban en puestos públicos; con el tiempo, y ya siendo presidente de Altamira cambio sus dos viejos camiones por una flotilla de 10 flamantes vehículos, mismos que a través de un prestanombres renta al Ayuntamiento para las pocas obras que existen en construcción.
Sin embargo la desatada ambición del ex empleado de Sedesol va mucho más allá; De acuerdo a nuestros informantes Armando López es dueño de una comercializadora, y todo material que es utilizado para el Ayuntamiento debe ser comprado y facturado con precios inflados a esa empresa.
El negocio es redondo; Vende y transporta material sobrefacturado con cargo a la tesorería municipal.
Tan lucrativo ha resultado este negocio que aparte de la flotilla de camiones el alcalde ha comprado dos propiedades, una ubicada en el exclusivo fraccionamiento Lomas de Miralta en Tampico y la otra en Monte Alto, en Altamira, ambas con un costo aproximado a los 20 millones de pesos.
TRAFICO DE INFLUENCIAS; JAVIER GIL EL BENEFICIARIO
Armando López llegó a la alcaldía con el apoyo político y económico de Javier Gil, un personaje emparentado con el ex Gobernador Eugenio Hernández Flores, gracias a quien logró llegar a ser presidente de Altamira y Diputado Federal; Armando López, en su afán de llegar a ser presidente tejió una alianza con este personaje, a quien le ha estado pagando lo que invirtió en su campaña a través de una triangulación que le reditúa al ex presidente lucrativas ganancias; Javier Gil es el dueño del edificio en el que se estableció el Ayuntamiento desde que se decidió fuera destruido y vuelto a edificar, razón por la cual se le paga una renta mensual desde hace más de un año (la información acerca de cuanto se paga es guardada bajo el secreto más absoluto) y a la vez, el mismo Gil es el dueño de la constructora que realiza la obra de construcción del edificio, misma que ya tiene más de 6 meses de atraso y no se ve para cuando sea inaugurada; a más tiempo que se retarde la obra, mayor ganancia por ambos lados para Javier Gil, ya que el costo de construcción se disparó a casi un 100% más de lo presupuestado en tanto la renta de su local sigue corriendo; Así Armando López cumple con uno de los compromisos contraídos con su jefe Javier Gil, en lo que está tipificado por la ley como “Tráfico de influencias”.
Otro de los compromisos del alcalde con Javier Gil es el político, en el cual se tiene contemplado hacer llegar a la presidencia ya sea al mismo Javier o a la ex diputada y flamante Directora de Sedesol en Altamira, Griselda Carrillo; de esto daremos cuenta en nuestro siguiente escrito.
