¡En la CTM mando yo: García Román!
Punto por punto
Raúl Hernández Moreno
Septiembre 23
Como en los viejos tiempos, Edmundo García Román golpeo la mesa y alzó la voz: ¡El secretario general soy yo, en la CTM mando yo!
Y así, en un dos por tres, el dirigente estatal de la CTM, acabó con la ilusión del ex alcalde Daniel Peña Treviño, de ser el nuevo dirigente municipal de esa central obrera, en sustitución de Francisco Martínez Cortés.
Y pensar que cuando Daniel Peña Treviño era alcalde, en el trienio 2005-2007, le regaló una camioneta del año a García Román. Claro, la camioneta ya debe estar muy traqueteada, en el supuesto de que el líder cetemista estatal la conserve y quizá por esa sencilla razón no siente ningún compromiso con Daniel.
Luego de que Edmundo García Román le dijo a Daniel Peña que no sería dirigente de la CTM, éste no tuvo más opción que llamar a una estación de radio para decir que se auto-descartaba para la CTM. En esa misma estación, el lunes lo habían “destapado” y habían dicho que ya les habían confirmado que Daniel sería el nuevo dirigente. Se adelantaron y es posible que lo hayan perjudicado.
No cabe duda que la vida es caprichosa. El año pasado, cuando se llegó el cambio en la CTM, Francisco Martínez les notificó a los secretarios generales que no se iba a reelegir. A Daniel Peña le ofrecieron la posición, pero él dijo que no estaba interesado. En cambio, ahora que si estaba interesado, le dijeron que no.
Nos comenta el abogado Fernando Ríos Rodríguez que estatutariamente Daniel Peña debe reemplazar a Francisco Martínez, por ser el secretario general adjunto y cumplir el período para el que se le eligió, que fueron 6 años que se cumplen en abril de 2020. Los estatutos hoy no sirvieron, se impuso la decisión de Edmundo García Román, al viejo estilo de don Fidel Velázquez.
En 1992, cuando el profesor Pedro Pérez Ibarra salió del país, perseguido por la justicia federal, desde el exilio recomendó como su sustituto a Manuel García Urzúa y la mayor parte de los secretarios generales aceptaron la instrucción. Haberlo elegido habría sido atender la voz de la mayoría. Sin embargo, Manuel Cavazos se opuso a la llegada de García Urzúa y convenció a Don Fidel Velázquez de que el dirigente fuese José María Morales Domínguez. Tanto Don Fidel, como el propio Chema Morales, se apresuraron en deslindarse de Pérez Ibarra. Al carajo mandaron una relación de amistad de muchos años.
Con el descarte de Daniel Peña, el aspirante más fuerte para hacerse cargo de la CTM es Luis Eduardo Martínez, con sus 16 mil afiliados en el Sindicato de Maquiladoras.
También aspiran Joaquín Treviño Reyes y Félix Alberto Alemán. Cualquiera de esos puede ser. Total, va a ser el que quiera Edmundo García Román, por algo golpeo la mesa y grito ¡En la CTM mando yo!