Los vertederos químicos del lago Insisten en mercado de abastos
Tintero
Al descubrirse lo que en apariencia puede ser un foco de infección bastante riesgoso para la salud pública, familias de Nuevo Laredo se oponen a la reconversión del laguito artificial como centro de atracción para chicos y adultos.
El abogado Francisco Hernández, opositor del proyecto Canturrosista advierte que en vez de derrochar los 38 millones de pesos en la rehabilitación del lago, saneen el área y sancionen a las industrias responsables de los vertederos químicos que contaminan sus aguas.
En los últimos días las corrientes de agua que desembocan en el lago han arrastrado mantos espumosos presuntamente tóxicos, que provienen de las industrias establecidas en los alrededores.
Exhortamos al alcalde a que mejor invierta ese dineral en un proyecto viable y de gran beneficio social como el mercado de abastos que mucha falta le hace a Nuevo Laredo, porque respalda a los consumidores con productos frescos y más baratos.
Hernández Arias no simpatiza con la idea de convertir al laguito en una obra de cabecera puesto que la ciudadanía prefiere la central de abastos a un espacio de diversión que no se sabe si será funcional en los terrenos donde piensa establecerlo, dado el vandalismo que se da por todas partes.
En cambio el mercado de abastos resolvería añejos problemas de falta de concurrencia y encarecimiento de las mercancías de primera necesidad, amén de que estimularía la producción de hortalizas y vegetales de la región.
En momentos difíciles de una economía impactada por la devaluación del peso frente al dólar, el asalariado no sabe ya cómo hacer rendir su dinero y busca complementar sus provisiones concurriendo a los mercados paralelos de Nuevo Laredo y Laredo,Texas.
La leve recuperación del peso en días recientes trajo un poco de alivio a los mexicanos fronterizos sin que por ello puedan cantar victoria ya que los precios del mercado interno impulsados por la devaluación en los primeros meses del 2015, fue un detonante de las alzas en cascada de los precios al consumidor y está probado que todo lo que sube en México difícilmente vuelve a bajar.
Pensando en el impacto social favorable que el mercado de abastos traería en Nuevo Laredo, la sociedad civil lo apoya con entusiasmo máxime que es un proyecto que resolvería las necesidades de las clases más necesitadas de la región.
Ojalá que el conflicto de interés existente entre el municipio y los grandes monopolios comerciales de la ciudad, se supere por el bien de las familias más necesitadas de este puerto fronterizo.
Y es que por mucho, el laguito artificial no puede ser más importante que una central de abastos porque como se planteó, estimularía bastante la explotación agrícola regional que fue uno de los bastiones importantes de la economía local en décadas pasadas.