VISITA DE MADERO, OPACADA POR ESEQUIEL PEDRAZA
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Raúl Hernández Moreno
Mayo 28
Gustavo Madero vino a Nuevo Laredo, se llevó 400 mil pesos por pago de honorarios, se fue y ya nadie se acuerda de él.
Para desgracia del PAN, justo el día en que vino Madero, Esequiel Pedraza se pronunció públicamente a favor de Yahleel Abdala y el impacto mediático opacó la visita de Madero, quien vino a decir que con “Lupita” Zarate el PAN ya ganó. Ni siquiera los 400 mil pesos que recibió por su visita, lo motivaron a aprenderse de memoria el nombre de la candidata.
En el 2012, Gustavo Madero si se aprendió muy bien el nombre de la candidata presidencial del PAN y repitió una y otra vez, que con Josefina Vázquez el PAN continuaría en Los Pinos. Su buenos deseos no solo no se cumplieron sino que además Josefina acabó en el tercer lugar. Que ahora diga que “Lupita” será la ganadora, no tiene credibilidad. Ahora falta que el 7 de junio se repita la historia del 2012 y el PAN termine en el tercer lugar de las votaciones.
Por lo pronto en la reciente encuesta que realizó la Coparmex, el PAN quedó en cuarto lugar, superado por el PRI, Independiente y el PRD. Esos resultados son evidencia del hartazgo ciudadano, por el mal gobierno de Carlos Canturosas, que se ha dedicado a saquear las arcas públicas.
Las calles de la ciudad están destrozadas por todos los rumbos, de tal manera que en broma los ciudadanos comentan que ya nos atacó un tornado, el tornado CCR.
A cambio de los honorarios estratosféricos que recibió, Gustavo Madero se dedicó a alabar a Canturosas y poco falto que lo destapara para la gubernatura en el 2016. Para mala suerte de Canturosas, Madero deja la dirigencia del PAN en agosto. No podrá meter las manos por él en el 2016 y menos cuando está muy alejado del posicionamiento que tiene el senador Francisco García Cabeza de Vaca, el mejor prospecto del PAN para el 2016.
En medio de todo esto, se filtró la información de una bitácora de gastos realizados durante la campaña en la cual Carlos Canturosas pretendió imponer como dirigente estatal del PAN a Agustín Chapa.
En cinco cuartillas, están contenidos 75 nombres de dirigentes y militantes panistas de todo el Estado, a los que se les entregaron recursos económicos durante los meses de noviembre y diciembre de 2014, por un total de 605 mil 500 pesos, con el fin de promover a Agustín Chapa.
En la bitácora de gastos, aparecen las cantidades entregadas a cada uno de estos panistas, en qué municipio están, así como la fecha en que se les dio el recurso, y para qué tarea se les dio el dinero.
En el documento aparecen nombres como el diputado Juan Patiño, de Matamoros, a quien se le entregaron 35 mil pesos; la diputada Patricia Rivera, por San Fernando, que recibió 24 mil pesos; hay personaje de Méndez, Burgos, Altamira, Mainero, Soto la Marina San Carlos y Cruillas, que aparecen sin cantidades, pero la leyenda “arregla Nely”, presuntamente la alcaldesa de Mainero, Lázara Nelly González.
En San Fernando, se entregaron 100 despensas, con un gasto de 19 mil 500 pesos que se entregaron el 12 de diciembre de 2014.
En Madero se entregaron 137 mil pesos que en su mayor parte se le dieron a un tal Oscar Morado.
Además, de esta lista parcial de 605 mil pesos, de Nuevo Laredo salieron 14 operadores que fueron enviados a diversos municipios con el fin de comprar votos. A cada uno se le entregaron 400 mil pesos.
En el sur de la entidad una de las operadoras fue Luz Irene Alzaga quien desde el arranque del proceso interno le aseguró al alcalde que el voto del sur seria definitivo para el triunfo de Agustín Chapa y al final fue el sur el que le dio la victoria a César Augusto Verastegui Ostos.
El ayuntamiento no solo desvió recursos millonarios en un esfuerzo inútil de posicionar a Agustín Chapa, sino que para colmo se perdió la elección y Canturosas todavía tuvo el cinismo de presionar a Agustín para que impugnara los resultados.
Si en una simple campaña interna el Ayuntamiento de Nuevo Laredo desvió recursos por más de 7 millones de pesos, esto nos da una idea muy sencilla de cuánto se están gastando en la campaña de diputado federal, donde el gasto sobrepasa los 60 millones de pesos, en espectaculares, mantas, camisetas, gorras, pago de 8 encuestas cada una de 80 mil pesos, gasolina, promoción en medios de comunicación, sobre todo en radio, a pesar de estar prohibido por la ley, compra de votos etc.