TINTERO
Por Francisco Pucheta González
La militancia panista de Nuevo Laredo que vive una etapa de segregación por parte del gobierno municipal encabezado por Carlos Canturosas, apelará al comité directivo estatal para ser tomado en cuenta en las elecciones de 2016, anuncia el ex directivo de ese instituto, Raúl Huerta.
El próximo año habrá renovación de la gubernatura y de la alcaldía por lo que esperan reintegrarse a su activismo normal, sin la presión ni el oportunismo de Cantúrosas Villarreal y su gente a quienes tildan de advenedizos.
El también ex regidor de esa fracción política manifiesta que hay un ofrecimiento formal de las dirigencias nacional y estatal de que a partir del año próximo en que habrá renovación de los poderes estatales y municipales, les cumplirán la promesa de que ahora sí podrán participar en la elección de sus candidatos.
La inconformidad del panismo neolaredense se da precisamente con la postura de Carlos Canturosas de romper con los verdaderos militantes de Acción Nacional para incorporar a los ex priistas chapulines vestidos de azul.
El canturrosismo denigrante debe erradicarse de Nuevo Laredo porque ha demostrado ser un gobierno insensible, agresivo, botarate que asume la cosa pública como botín político, según la opinión generalizada de los panistas de pura cepa.
Advierten que en la campaña para la diputación federal el gobierno municipal está desviando millonarios recursos que muy bien puede ser fiscalizado por el INE para sancionarlo y anular a su candidata.
