Por: María de Jesús Cortez
*Son prepotentes y les falta sensibilidad humana
María de Jesús Cortez / NT / ANTAM
Tampico, Tamps.- La corrupción, prepotencia e irresponsabilidad del personal que labora en el Hospital General No. 6 del Instituto Mexicano del Seguro Social quedaron al descubierto la tarde del jueves luego de que derechohabientes se quejaron de algunas enfermeras y médicos del área de Oncología de quienes aseguran recibieron mal servicio, desobedeciendo con ello las instrucciones del director, Julio Moreno Mercado.
Gustavo Sobrevilla Morales, enfermo de cáncer de próstata, declaró que desde el lunes 01 de diciembre ingresó al área de oncología de IMSS, buscando una atención y transcurrieron 4 días y nunca la recibió.
«El paciente está bajo la observación de la urologa Nora Hilda Chávez, quien durante este tiempo -dijo el enfermo- sólo sólo ha diagnosticado medicamento para dolor», expuso Guadalupe Mendo Guerrero, cuñado del enfermo.
«Hoy supuestamente dan de alta a mi cuñado, lo que vemos imposible pues durante cuatro días no ha podido recibir atención para tratar el cáncer de próstata por el que llegó al hospital. La doctora que lo atiende pasó un par de veces a verlo sin hacerle ningún chequeo o mandarlo a realizar estudios y así, lee diagnóstico medicamento para dolor. Ya hablamos con el director del hospital y nos garantizó atención de calidad, sin embargo, el personal de Oncología es muy prepotente y grosero», resaltó el familiar del paciente.
Mendo Guerrero reveló que hay mucha corrupción y entre ellos se cubren. «Las enfermeras de oncología siempre están de malas por lo que su atención es de mala manera, el colmo es que piden que sea el propio director quien les dé la indicación de cómo tratar a los pacientes».
Explicó el entrevistado que al ser derechohabientes del Seguro Social decidieron acercarse a esa institución para recibir atención médica, sin embargo ahora aseguran que fue una mala decisión pues quienes allí trabajan carecen de sensibilidad para atender a los enfermos.
Dijo el familiar del paciente que continuarán entablando el diálogo con el director del nosocomio pues consideran que el diagnóstico que se les está entregando a su familia no es el correcto pues existen otros casos en donde los pacientes han tenido que regresarse a sus casas sin medicamento.
«Lo único que buscamos es recibir una atención, no queremos bonitas caras ni sonrisas creo que pagamos con nuestro trabajo el servicio y por ningún motivo tenemos que vivir calvarios para ingresar a un hospital y que ahí no tengamos ayuda», concluyó.
