Colisionan en la Interejidal
Publicado el 18 de agosto, 2014 a las 10:22 horas. Escrito por Alejandro Dávila zona-5-1-A-90-interejidal
VICTORIA, Tamaulipas.-Un empleado y sus dos hijos menores de edad resultaron lesionados, pues a pocos segundos de haberse estacionado, el automóvil en que viajaban fue chocado por una camioneta que conducía una persona en estado de ebriedad, el cual, metros antes ya había chocado contra otra unidad también estacionada.
Elementos de Protección Civil atendieron a Reyes Alcocer, de 41 años de edad y, a sus dos hijos de 8 y 10 años, todos residentes del ejido El Refugio municipio de esta capital.
Afortunadamente, la familia resultó con golpes que no fueron de consideración por lo que no requirieron ser trasladados al hospital.
El peritaje efectuado por el agente de tránsito, Rubén Niño Zúñiga, responsabilizó de este accidente a Mario Alberto Martínez Cepeda, de 30 años de edad y residente de la colonia Chapultepec.
El empleado conducía en estado de ebriedad, una camioneta marca Ford Ranger, modelo 1995, que desplazaba en dirección de sur a norte sobre la carretera interejidal.
Al llegar al cruce con la calle Silvestre Mata, el briago, declinó a su extrema derecha y se estrello contra la parte posterior de una camioneta Chevrolet, modelo 1992, que estaba estacionada.
Esta unidad es propiedad de Juan Bernardo Méndez Huerta, de 34 años, con domicilio en la calle 5 de Mayo de la colonia Vicente Guerrero.
Luego del fuerte encontronazo, la unidad responsable continúo su loca trayectoria hasta proyectarse contra un automóvil Chevrolet Cavalier, modelo 1992, donde viajaban los lesionados.
Esta última era tripulada por Reyes Alcocer, quien explicó que acababa de estacionarse cuando inesperadamente fue chocado por la camioneta.
Los agentes de Tránsito inspeccionaron en el interior de la Ranger y encontraron varias latas de cerveza lo que confirmó el estado inconveniente del chofer, el cual fue detenido y llevado a la delegación del 2 Zaragoza.
El perito estimó que los daños materiales en 30 mil pesos y una grúa particular se encargó de remolcar las unidades al corralón.