*Médicos le dan muy pocas posibilidades de sobrevivir a la lesión de bala en la cabeza.
Por Eduardo Bandín /ANTAM.
Reynosa, Tamps.- Las investigaciones de la Procuraduría en el caso del mecánico herido de bala tras un accidente; arrojaron que ni víctima y victimario tripulaban los vehículos accidentados, sin embargo, el conductor responsable si está detenido y un mirón menor de edad.
Aunque los agentes federales no aportaron boletín del incidente, la institución en uso de sus diligencias públicas permitió conocer el desarrollo de los hechos, a partir del choque de daños leves entre el Honda Accord de Juan Fernando Chávez Valencia de 56 años, tío del herido Aldo Becerra Franco.
Y del Focus 2011 color blanco que conducía Armando Rangel Lara de 23 años que permanece detenido en los separos de esa dependencia y en cuya declaración negó rotundamente ser el agresor de Becerra Franco; no portaba arma de fuego, no conoce al otro detenido y menos a los tripulantes de la Chevrolet pickup que dejaron abandonada en el lugar luego del atentado.
Sin embargo, la Procuraduría no cree en esa versión y expone que alrededor de las 13:15 horas Chávez Valencia arranca en su auto Accord sobre la Occidental en esa misma calle circulaba rebasando el Focus y según se determinó invadía carril razón del roce lateral de ambos coches.
Chávez Valencia baja para reclamar lo mismo hace Rangel Lara como lo atestiguaron agentes federales desde la esquina de la calle Saltillo, minutos después llega la pickup color blanco de descienden unos cuatro sujetos y arremeten contra Chávez Valencia.
En esos momentos Becerra Franco iba a la lavandería en busca de su esposa Samantha Santana Barajas de 30 años y sus dos hijos, ve la agresión e interviene en el momento justo cuando le exigía a su tío las llaves del Accord dos de los atacantes lo sujetan desde atrás y el replica a pariente que entregue las llaves.
Samantha con sus hijos a gritos trata de detener la violencia en el instante que uno de ellos levanta un arma toma las llaves dispara Becerra cae frente a la puerta de la lavandería casi asesinado a sangre fría frente a su familia.
La detonación alerta a los agentes federales que ya corren hacia el sitio se cree que el del arma aborda el Accord de Chávez Valencia y huye los otros a pie, pues la camioneta estaba en bloqueada por otro vehículo particular del tránsito normal de la hora pico.
Becerra Franco se aferra a la vida en el hospital y de sobrevivir los médicos no tienen idea de los daños o secuelas que dejara tanta destrucción del tejido cerebral, Samantha supone que la bala tenía como destino su cuerpo sintió que el tirador la vio fijamente antes de jalar el gatillo, pero en el forcejeo llevó a su esposo a interponerse entre el disparo y ella.
Todos los involucrados ya rindieron declaración, incluso una mujer que aparece en los registros vehiculares como la dueña de la Chevrolet, pero la Procuraduría se negó a revelar identidad y lo manifestado por razones de sigilo en la averiguación previa.
Pero no omitieron en describir que el delito principal es el homicidio en tentativa con agravantes, el robo con violencia de vehículo, y se subsuman lesiones, amenazas y hasta los daños que quedan implícitos en la denuncia por el hurto del Accord.
