Omar Lara Martínez/EnLíneaDIRECTA
Madero, Tamaulipas.- El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del municipio de Pueblo Viejo en el estado de Veracruz, dio a conocer la existencia de un nuevo caso grave de bullying que está llamando poderosamente la atención, ya que el pequeño Samuel Moreno Hernández de 7 años de edad, estudiante del nivel primaria podría quedar cuadripléjico debido a las agresiones de las cuales fue objeto.
La presidenta del voluntariado en Pueblo Viejo, Rosario Gómez de Cuan, explicó que el menor, estudiante del segundo grado en la escuela primaria Vicente Guerrero en la ciudad norveracruzana, durante la hora del recreo fue empujado fuertemente por tres niños de sus compañeros, quienes posteriormente se le arrojaron encima, al parecer causándole lesiones severas.
Dijo que después de esto el menor poco a poco dejo de tener movilidad hasta no lograr incorporarse por sí mismo, por lo que fue trasladado al hospital “Carlos Canseco” de Tampico donde se quedó internado debido a su estado desde el pasado 8 de mayo, aplicándole un examen de evaluación para tratar de determinar la parte afectada y darle tratamiento, lo cual no fue suficiente.
La presidenta del DIF en Pueblo Viejo, hizo el llamado a la comunidad para conseguir apoyos para la realización de un segundo estudio, el cual es muy costoso, ya que se trata de una resonancia magnética, pero los padres del menos son de escasos recursos y el voluntariado en este momento no tiene la solvencia para este tipo de evaluaciones, ya que pagó el primero que también tiene un costo elevado.
“Pues a los padres del niño que asuman su responsabilidad, a los padres en general que pongamos mayor atención a estas situaciones, ya que cada vez se dan más seguido y a veces son motivadas porque nosotros los instamos a que se defiendan como puedan y eso no es el caso, por eso hay un maestro o un encargado que va a ser el que ponga como autoridad un hasta aquí cuando andan con juegos bruscos, pues esto fue un accidente, no podemos decir no paso nada y hazle como puedas”.
Lamentó que la directora de la escuela, María Virginia Castro, así como la maestra del grupo de quien no tienen el nombre, se quieran ahora lavar la manos en este asunto que sucedió al interior de la primaria, al grado de no recibir, ni atender a los padres del menor al momento en que deseaban dialogar con los directivos de la institución educativa para que se hicieran responsables.
Aseguran que la actitud de la directora de la primaria ha sido tan altanera que mandó una amenaza al padre del menor que si vuelve a solicitar información de los niños de la escuela lo demandaría.
Sobre los padres del menor, son personas que no se defienden y debido a que no tienen una preparación académica adecuada, casi no hablan, ni dicen las cosas.
