Desde hace más de una década ha contratado a mujeres para ponerlas a su servicio, y después pedirles favores sexuales. Todo, en sus diferentes cargos públicos. Este viernes comparece ante la Comisión de Justicia del PRI, que definirá en las próximas semanas si es expulsado o no del partido político.
Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, el dirigente del PRI en el DF con licencia, enfrentará este viernes uno de los dos procesos de expulsión en su contra.
A partir del mediodía, comparecerá ante la Comisión de Justicia Partidaria para responder a los señalamientos que pesan sobre él, en torno a la red de prostitución que operaba dentro del PRI.
Desde hace 11 años hay rastros sobre cómo personas cercanas a Cuauhtémoc Gutiérrez contrataron a jóvenes a quienes ofrecieron dar atención especial al dirigente tricolor.
A lo largo de su carrera política, desde los puestos de mayor jerarquía, ya fuera como asambleísta en el DF, como diputado federal o, recientemente, en su desempeño como presidente del PRI en la ciudad de México, sus allegados buscaron atraer a jóvenes en apuros económicos.
Año 2003. Tres mujeres interpusieron una demanda laboral en contra del PRI en el DF, por despido injustificado. Las jóvenes aseguraron que su salida fue por negarse a tener relaciones sexuales con Cuauhtémoc Gutiérrez. Ocho años después, en noviembre del 2011, el PRI pagó un millón 100 mil pesos como indemnización a las tres mujeres tras perder un juicio de amparo.
Año 2006. Gabriela —a quien llamaremos así por razones de seguridad— llamó a los teléfonos de un anuncio de El Universal, donde solicitaban edecanes para un diputado. Cuando acudió a la segunda entrevista, el propio Cuauhtémoc Gutiérrez le pidió caminar como en una pasarela:
“El diputado me dice a mí: ‘necesito que camines de aquí hacia la sala de juntas’. Ya estaba abierta la puerta de su oficina. ‘hacia la sala de juntas, hacia tal librero, hasta la punta, del otro lado, y de regreso’. De una manera muy incómoda, un poco vergonzosa, pues sí tuve que hacerlo. Pensando que obviamente la formalidad de todo eso ya se había perdido. Lo hice, voy, vengo, súper tiesa. Tampoco iba a hacer ahí una pasarela. Y ya, regreso. Se quedan viendo uno al otro como diciendo ‘pues sí, sí pasa la prueba’”.
A finales de 2006, Gutiérrez de la Torre ya no era asambleísta pero su equipo lo trataba como si aún lo fuera. Tras una larga espera, la llevaron a otra oficina para explicarle sus verdaderas tareas:
“Las niñas que están afuera son novias del diputado, o sea, son como sus damas de compañía, y tú le gustaste para su novia. Quiere que tú lo acompañes, sí, a la Cámara de Diputados, sí, que hagas cosas administrativas, y que hagas alguna que otra labor. Sí le gustaste y el trabajo más importante es pues tener relaciones sexuales con él. Todas las muchachas que están aquí afuera han pasado por la misma situación”.
Gabriela no volvió.
En abril pasado, cuando escuchó el reportaje de Noticias MVS sobre la red de prostitución, decidió contar lo que vivió.
“Inmediatamente recordé todo lo que pasó esa vez y dije no es posible, ahora no me voy a callar. Aquella vez, la verdad, me dio miedo denunciar. Creo que ni siquiera me pasó por la cabeza denunciarlo, la verdad. Porque aparte tenían ya todos mis datos, santo y seña de mí”, dijo.
Año 2010. Cuauhtémoc Gutiérrez se convirtió en diputado federal. Sus allegados tenían dos rutas para atraer jóvenes como supuestas edecanes. Una de ellas, era a través de entrevistas directas en la oficinas del PRI capitalino.
Una chica, a quien llamaremos Karla para proteger su identidad, relató que una amiga le recomendó trabajar en ese partido mientras lograba estabilizar su economía. En cuanto llegó, le pareció extraño el número de mujeres que realizaban la misma tarea.
“Éramos realmente digo muchas, digo muchas porque a lo mejor para salir necesitaría una. Éramos como 11 o 12 chavas en el mismo lugar”.
En unas cuantas horas, cada vez eran más edecanes para atender a una sola persona.
“Yo llegué un martes, ingresé el mismo martes, al otro día fue miércoles e ingresaron otras dos niñas, dos. Y el jueves ingresaron otras dos. O sea, que para el final del jueves, el último día que yo me presenté, ya éramos 12”.
Entre ellas había dos cubanas, una de las cuales aparentaba ser la novia de Cuauhtémoc Gutiérrez.
“Dos chavas que estaban ahí, dos cubanas. Una me parecía que era su pareja, no sé si sentimental o qué. Pero cuando él llegaba ella llegaba, y cuando él se iba ella se iba”
En el PRI ocurrían cosas fuera de lo normal para un trabajo de edecán:
“Creo yo raro que de repente una chava la llamaron, la llamaron para que le llevara agua o cualquier cosa y regresó despeinada y despintada de la boca. Sí, la observé y me pareció extraño porque además sí se tardó, porque en lo que vas y regresas y como nos decían que tenemos que ir y regresar rápido, ella se tardó regresó así y medio extraña”.
Ante este panorama, Karla dejó de trabajar como edecán en el PRI antes de que le propusieran prestar servicios sexuales. Cuando se enteró de la investigación sobre Cuauhtémoc Gutiérrez, pensó lo cerca que estuvo de caer.
“Me deja muy mal el pensar que estuve cerca, tan cerca. Y uno piensa que ya consiguió un trabajo con el cual puede sostener a mis hijos, a mi familia que somos 3, y me pesa aún más el hecho de que con dinero de nosotros mismos estamos manteniendo allí”
Año 2011. La segunda vía para contratar edecanes dispuestas a tener relaciones sexuales con el priista, fue a través de la empresa fachada llamada Publimet.
Publimet está registrada ante la Secretaría de Economía y la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en pequeño del DF. Su dirección era la calle puebla 398, en la colonia Roma, a nombre de Claudia Priscila Martínez González. En el diario “El Universal”, Alejandra, encontró una oferta de trabajo como edecán “para oficinas de gobierno”. Ella aceptó brindar su testimonio si se protegía su identidad. El anuncio le dio confianza y pidió una cita… la entrevista se la hizo una mujer que se identificó como Claudia, en el número 398 de la calle Puebla. Fue ella quien le dijo que, aunque superaba el promedio de edad solicitado, su perfil, sin duda, le gustaría al jefe:
“Yo pienso que es algo normal no hay ningún problema, hasta que llegamos al punto en el que me dice que si soy de amplio criterio. Entonces, bueno, el amplio criterio para un trabajo pues lo consideraba de otra manera, entonces cuando le comento que sí, ella me indica que me lo pregunta porque entre las funciones que tendría que realizar, tendría que. Una de ellas sería, hacerle sexo oral cuando lo pidiera, al diputado, o ya hasta…bueno… Eso sería algo básico, o hasta tener relaciones sexuales con él”.
Al escuchar el reportaje sobre la red de prostitución en el PRI del DF, Alejandra revivió aquella entrevista del año 2011 en la colonia Roma:
“A mí me pareció como que era un speech lo que manejan en sus entrevistas porque cuando yo escuché el momento en el que están entrevistando a la reportera, yo reviví nuevamente la entrevista que yo tuve en ese entonces, porque era básicamente lo mismo”
Año 2014. El pasado 2 de abril, Noticias MVS, primera emisión, reveló que una reportera infiltrada grabó a Priscila Martínez, la principal enganchadora de esta red, cuando proponía, a las aspirantes a edecanes, sostener relaciones sexuales con Cuauhtémoc Gutiérrez.
“Entras, besuqueo, cachondeo luego, luego, ya sabes. Se manejan dos tipos de relación, que es oral y vaginal. Oral es sin protección, vaginal es con protección. Él ahí tiene todo. Terminando, te digo, estos son 10 minutos, termina, pasas a su baño, tiene enjuague bucal, pasta dental, isodine, todo lo de higiene, ¿no?, te peinas, te arreglas, sales y él ya está en su escritorio, entonces ya es así como de “¿se te ofrece algo?”
Tras esta revelación, se presentaron tres denuncias ante la procuraduría capitalina, una más ante la procuraduría general de la república y un acta circunstanciada ante la subprocuraduría especializada en investigaciones de delincuencia organizada, la SEIDO.
Priscila Martínez, aspirante al senado por el PRI y miembro de la comisión de justicia partidaria, mintió en el testimonio que dio a la Procuraduría del DF, al decir que le pagaron 30 mil pesos para realizar una supuesta grabación de 40 minutos, con la que se vengaría del dirigente del PRI.
La grabación la hizo una reportera infiltrada sin que Priscila se percatara y en realidad dura casi cuatro horas, no está editada y comprueba la existencia de una red de prostitución al interior del PRI. Al mismo tiempo, incrimina a Priscila como parte de este esquema de reclutamiento de mujeres.
El 25 de abril, la comisión permanente del Congreso de la Unión aprobó un exhorto al procurador capitalino, Rodolfo Ríos Garza, a que logre una ejecución de justicia efectiva y contundente en contra de Cuauhtémoc Gutiérrez.
El diputado del DF por el PAN, Federico Doring, dijo en MVS que presentaron la denuncia ante la PGR porque no confían en la actuación de la procuraduría local:
“En el caso de una procuraduría que ataca y castiga y procesa a un connotado priista podemos acudir a la PGR con una mejor expectativa de que se aplique la justicia que ir a perder el tiempo a la procuraduría de local, la procuraduría para nosotros ha perdido la fe”
“No le damos el beneficio de la duda a la procuraduría capitalina y en este tema te lo dice el congreso de la unión que le dijeron al procurador la semana pasada oiga haga algo, deles garantías a las víctimas que quieren denunciar”.
“La parte de la madeja que se jala se hace hilo se cae todo, si procesan a Priscila por falsedad de declaración ella evidentemente va a decir la verdad, pero cuando ella diga la verdad va a decir todo lo que alguien está tratando de ocultar con este libelo de que supuestamente se le pago y te dice también porque alguien no jala el hilo, el procurador lo que sí sabe es que ficha puede presionar y llegar al fondo del asunto”.
A 58 días desde que se presentó el reportaje y 19 días después de que noticias MVS entregó elementos de prueba a la Procuraduría del DF, aún no hay detenidos por este caso.
