En un desalojo sin previo aviso, trabajadores del ayuntamiento de Tuxtla Gutiérrez, en Chiapas, despojaron a una familia de su local comercial, que representaba su principal fuente de ingresos. Héctor de Jesús Martínez, quien trabaja en este establecimiento desde hace 20 años y tiene una discapacidad, denunció que la administración municipal, encabezada por el alcalde Carlos Morales Vázquez, no proporcionó ninguna justificación para esta medida.
A pesar de los intentos de Héctor por establecer un convenio y regularizar la situación con las autoridades, el encargado del área de Coordinación General de Política Fiscal del ayuntamiento, Javier Eduardo Crocker Gutiérrez, nunca lo recibió ni ofreció soluciones. El desalojo se llevó a cabo este fin de semana, durante el cual los fiscales del ayuntamiento sacaron a la calle las pertenencias de la familia, rompiendo y destrozando lo que constituía su único sustento.
La familia, que estaba en el proceso de presentar la documentación necesaria para regularizar el local, se encuentra ahora en una situación de incertidumbre. Los niños continúan estudiando, y los gastos familiares siguen presentes, lo que agrava la urgencia de encontrar una nueva fuente de ingresos para sostener y sacar adelante a la familia. Este caso refleja la falta de diálogo y soluciones por parte de las autoridades, afectando directamente a quienes dependen de pequeños negocios para subsistir.
