VIDA DIARIA
Por: Rosa Elená Gonzalez
Triste que los sindicatos, que en teoría son creados para proteger los derechos laborales de los trabajadores de una dependencia o empresa, estén en la práctica muy lejos de cumplir con los preceptos por los cuales fueron creados.
Existen sus excepciones, pero en la mayoría de los casos se puede decir que los sindicatos son una guarida de ladrones y sus líderes los jefes de esos bandidos con membrete, con licencia para asaltar, ofertar las dignidades de sus agremiados, extorsionar a los patrones, y lo peor, para robar a nombre, o a los mismos trabajadores, que deberían de proteger.
Por lo general los únicos que se enriquecen, y gozan de los beneficios de un sindicato, son sus líderes y el séquito que le rodean, que por lo general son parientes, compadres y hasta amantes, pero como bien dicen, en el caso de los sindicatos no tiene la culpa el indio sino quien los hace compadres, en este caso, quienes los mal eligen y tarde se dan cuenta de su error, tarde descubren que el cordero se convirtió en lobo hambriento de poder, fama y fortuna.
Lo anterior viene a colación porque algo grave está pasando con los agremiados al sindicato del Seguro Social en Tamaulipas, en esta semana llegaron a VIDA DIARIA varios correos de trabajadores que se quejan amargamente de su dirigente sindical.
Llama la atención que todos los correos son de queja, como el que dirigen en contra de una mujer de nombre BEDA LETICIA GERARDO HERNANDEZ, afirman que ella, su esposo, y aliados extorsionan de manera descarada y amenazan a los afiliados que si no se someten a sus caprichos les quitaran las bases sindicales y van a propiciar que sean despedidos de la institución.
Entre las quejas, dicen trabajadores que los obligan a no atender a la derechohabiencia para obligar a que el IMSS les dé más prestaciones, y ahí viene lo grave.
De Reynosa, una enfermera reporta que una muchacha embarazada estuvo a punto de morir porque no se le dio el servicio de manera inmediata por instrucciones de la líder sindical, triste porque en el logo del IMSS aparece una mujer con su hijo en brazos ya que se supone ahí se protege la vida de ambos y no que se atenta contra ella.
En Ciudad Victoria se denuncia el caso de un traslado urgente de un niño a la ciudad de Monterrey que cuando fue subido a la ambulancia por los sindicalizados que si están comprometidos con la dependencia y la salud de las personas de inmediato fueron bloqueados por los esbirros de la líder provocando que el paciente estuviera a punto de morir.
Cárcel es lo que merece ese tipo de personas y no estar al frente de sindicatos de instituciones qué, por ley, están obligados a brindar seguridad social y servicio médico de calidad a los afiliados que pagan sus cuotas para que ellos, los trabajadores del IMSS, cobren sus sueldos.
Lamentable que el servicio del IMSS dependa de gente sin escrúpulos, sin sensibilidad y humanismo, pero ¿qué se puede esperar de LETICIA GERARDO si es esposa de un doctor que fue sentenciado por homicidio ya que causó, presuntamente, la muerte de uno de sus pacientes?.
PEDRO LUIS RAMIREZ, es el esposo de LETICIA GERARDO, el doctor era quien se promovía para dirigir el sindicato pero desde oficinas centrales del sindicato del IMSS Nacional optaron por dejarlo fuera al enterarse que tiene un expediente penal, que estuvo preso y logro su libertad pagando una fianza de 30 mil pesos y eso les podía hacer mucho ruido.
Desde Matamoros nos señalan que el doctor PEDRO LUIS RAMIREZ fue procesado por homicidio culposo en la modalidad de negligencia médica, su expediente judicial es el 56/2006 y está vigente en el juzgado primero de distrito en Ciudad Victoria, obvio es que una persona con esos antecedentes no puede figurar al frente de un sindicato donde sus agremiados trabajan en el cuidado de la salud, siempre, se supone, privilegiando la vida.
Al quedar inhabilitado para ser dirigente del sindicato el listillo doctor impuso a su esposa BEDA LETICIA quien entro de emergente, pero él es el poder tras el trono.
Quizá todo estaría bien si no fuera porque están abusando de su poder en contra de sus mismos agremiados, y de paso, atentando contra la vida de los derechohabientes del IMSS.
En otro correo también acusan a la pareja RAMIREZ- GERARDO de traición, concretamente sindicalizados de Tampico aseguran que el exdirigente del IMSS, el doctor SALVADOR MOJARRO les dio su respaldo, pero como el poder no se comparte hasta le corrieron a su hijo, no fuera a ser que se le ocurriera luego quitarles la dirigencia.
La situación es que con tantas denuncias queda claro que algo muy grave está sucediendo con la dirigencia sindical del IMSS y sus agremiados, algo tendrá también que hacer el delegado JOSE MANUEL ASAD porque la institución es su responsabilidad y tiene que aplicarse en poner orden, no solo por el bien de sus trabajadores si no por el de todos los afiliados a la dependencia que él dirige.
vida.diaria@hotmail.com,Twitter@VidaDiaria1,FB Rosa Elena González.
