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Tarea en la escuela

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Maremágnum
Mario Vargas Suárez

Abro esta columna con la pesadumbre de la noticia. De la muy mala noticia que desde ayer, al filo de la media mañana, en el periódico defeño ‘La Jornada’, publicó que en una escuela primaria «La Corregidora», de Cd. Victoria, Tam., impactó una granada al filo de las 7 de la mañana.
El edificio de «La Corregidora», ubicado en el 3 y 4 Matamoros, de la zona centro de la capital del estado, se encontraba ‘vacío’ solo el conserje realizaba su jornada de aseo, cuando en el baño de las niñas, estalló el artefacto.
Las lecturas del mensaje tienen muchas interpretaciones y ninguna, por desgracia camina por senderos de paz, tranquilidad o sosiego y los especialistas son los encargados de encontrar simbolismos.
Violencia escolar es la que se interpreta en la escuela «La Corregidora» y esto pudiese llamarse ‘Bullying’ que no es otra cosa más que el acoso físico y psicológico que se da en la escuela, sobre todo en la educación básica.
Los teóricos del tema consideran que toda agresión física o verbal, desde insultos directos o encubiertos, hasta los golpes que dejan huella o solo ligeros empujones, las amenazas y anónimos, están considerados como ‘Bullying’.
El ‘Bullying’, por cierto, hasta parece está de moda, porque desde hace un muy buen tiempo, existen ‘especialistas’ que discuten, analizan, proponen y exponen ante foros nacionales y extranjeros sobre ello, y no falta quienes intentan remediarlo.
El tema del ‘Bullying’ es muy amplio y más cuando se asocia con el suicidio infantil, juvenil, o de adolescentes. Entonces la cosa adquiere proporciones mucho muy delicadas.
En una nota firmada por Juan Luis Ramos y Luis Rodríguez, del Diario electrónico 24 Horas llama mi atención su trabajo cuando lo titulan «Suicidio ronda a niños víctimas de bullying»
El tema se desarrolló dentro del marco del simposio ‘Acoso escolar: discusión o diagnóstico’, organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) donde se dieron a conocer datos por demás importantes.
Por ejemplo en la capital del país, el DIF local afirma que uno de cada seis niños que padecen bullying en el DF se suicida. La revelación es de verdad escalofriante, porque deben ser varios los factores que intervienen y sin dudarlo como responsable está la familia.
Leer sobre el tema me hizo recordar a una familia victorense, con tres hijos -dos mujeres y un varón- cuyos papás, cotidianamente reñían sin importar el escenario. Para sorpresa de muchos, la hija mayor a los 21 años y ya profesionista se suicidó… gran dolor y más cuando al año siguiente su hermano siguió el mismo camino: el suicidio. A ése matrimonio -deshecho por cierto- le quedó la niña pequeña, que en la menor oportunidad los abandonó.
Durante el Simposio, una revelación por demás escandalosa, es que el 40% de los estudiantes de primaria y secundaria sufren de acoso escolar. En el lado contrario, los acosadores, son el 8.8% de los niños de primaria y 5.6% de secundaria. Las agresiones se clasifican como algún tipo de violencia, desde verbal o física que finalmente repercute en la psicológica.
Como adulto me sorprendió enterarme que el 60% de los agresores confiesan llevar esta práctica por el placer de ver sufrir a sus víctimas y me quedo absorto para concluir que este tipo de escolares requieren de asistencia especializada que de plano, la escuela no es capaz de brindar, dice una de las conclusiones del DIF del DF.
Lamentablemente en la educación preescolar se encontró que el 17% de los menores de seis años, afirma que son golpeados o insultados; el mismo porcentaje aplica en niños de 10 a 12 años que vive el mismo acoso, todos en sus centros escolares
Por desgracia las cifras en el DF dadas a conocer sobre este tema, advierten que el fenómeno crece de forma exponencial, por lo que los chilangos no pueden suscribirse como una sociedad contemplativa, sin duda hay necesidad de operar acciones para combatir el bullyin.
Cierro esta columna con la refección hacia el interior de las familias y los centros escolares de Tamaulipas sobre el bullying y los suicidios de los niños y jóvenes que pudieron ser una buena promesa.

Comentarios: mario.vargas@starmedia.com

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