ESCENARIO POLÍTICO
Por Marco Antonio Torres De León
Acá en el sur (de América Latina) igual que allá en el norte, la política es chusca, ocurrente, graciosa y hasta hilarante.
Acá los colombianos llaman a su presidente Juan Manuel Santos transgresor de promesas, incumplido, olvidadizo amén de saber recriminarle severamente su afán de querer ser amigo a fuerzas del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cosa que nunca hizo su antecesor Alvaro Uribe, según la generación de hoy es uno de los mejores presidentes que ha tenido el país.
Los colombianos de a pie, de rancho, de las montañas, esos que circulan todos los días por las calles en religiosa vendimia llaman al venezolano Maduro simplemente ‘Podrido’, en una clara carcajada con desparpajo dirigida a Nicolás por llevar ese apellido.
Todo esto a pesar de las pruebas irrefutables que existen de que Nicolás Maduro es nacido en Cúcuta, una bella ciudad fronteriza de Colombia y a la vez lindero natural del corral que hay entre un país y otro.
Mientras allá en el norte de América Latina ENRIQUE PEÑA NIETO es acusado de iletrado, inculto, disléxico y grosero por el hecho de pasar por los templetes oficiales sin saludar a quien simplemente él no quiere, sea hombre, mujer o demonio.
Y también es acusado de estar gobernando un país sin derecho ni justicia, supuestamente que porque quien ganó aquéllas elecciones presidenciales fue ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, quien por su parte, a estas horas se conforma con fundar Morena, partido político que le generará dividendos mensuales multimillonarios, como a todos los mini-partidos existentes, Pvem, Pt, Panal y Convergencia por la Democracia.
Tratamos nosotros a toda costa de no irnos con fintas, pues sabemos que ser presidente de una nación es a fuerza un mal necesario; pues de otra manera hablaríamos de anarquía, o de estados fallidos, que vienen siendo –a estas alturas- peor que los malos gobiernos.
Lo que sí es pertinente subrayar es que a México acá en el sur lo siguen teniendo extra-oficialmente como si fuera un ‘Protectorado’ que vive a merced de los Estados Unidos (de los gringos), un rol muy parecido al que juega Puerto Rico.
Pero como dice el refrán, no se vayan a morder la lengua.
Pues en honor a la verdad, México y Colombia son hermanos de sangre en el amor y en la entrega apasionada sin reserva que le tienen a los Estados Unidos.
Son dos países símiles, iguales, hermanos, y que en función de filias y fobias, se parecen tanto.
No olvidar el suceso del avión que recién derribó y quemó el gobierno de Venezuela, motivo por el cual el gobierno de México puso el grito en el cielo, y creó con ello un supuesto caos diplomático binacional, haciéndolo acompañar hasta de amenazas de cierre de embajadas.
Cuando la verdad fue que todo no era sino un drama, una quimera, teatro, pantalla y un juego lúdico y divertido, mitad negocio mitad entremés, como si fuese fútbol.
Todo aquello fue un simple distractor mediático, pues se abordó –en aquél suceso- forma, más nunca fondo.
Conclusión: en una y otra parte, la política no es sino juego y multimillonaria diversión.
Aunque para concluir diremos que Juan Manuel Santos tiene todo a su favor, para lograr su reelección y ampliación de su periodo, que en Colombia es de cuatro años.
Y la verdad Alvaro Uribe no se reeligió (hace 4 años) por tercera ocasión consecutiva, no porque él no quisiera sino porque la constitución política de Colombia simplemente falló en su contra.
Su caso se llevó a los tribunales supremos de Colombia pero con mala suerte. Su petición fue denegada.
Fue por eso que Juan Manuel Santos gobierna hoy; y como todo político, ansía preservar, ampliar o alargar su poder. Y tras comenzar su gobierno en agosto de 2010, la matemática simple nos indica que su primer mandato acabará en agosto de 2014.
Así pues, asumimos que le resta menos de un año para concluir su periodo. Por ende, ya se le cuecen las habas por iniciar otra vez una campaña proselitista más.
Va por otros cuatro años.
Pero mejor pasemos a otro tema, de mi lindo Mante, Tamaulipas…
Desde que empezó el gobierno de Pablo González León al primer síndico José Vázquez Cano le gustó el protagonismo, lo cual no fue precisamente una estupenda señal. Mucho menos en tiempo de cólera.
Más bien fue una inquietante señal.
Pablo González León ni siquiera había cumplido su primera semana de alcalde y ya contaba con una pesada sombra qué quería, sin querer queriendo, arrebatarle el brillo natural.
Lo cual era un suceso preocupante, de entrada.
Recién Pablo González estrenaba su cargo cumpliendo funciones en la oficina de palacio municipal, recibiendo a sectores y a organizaciones en las consabidas (y necesarias en el mundo de la política) salutaciones protocolarias.
Mientras que allá abajo, en los corredores, pasillos y en el patio central JOSÉ VÁZQUEZ CANO asumía sin derecho de sangre un rol de portavoz oficial de Pablo González, cuando extrañamente Pablo está tan acostumbrado a ser sencillo, accesible y a trabajar sin tregua.
Pablo González León en realidad se mete en un sano esquema de Cero Protagonismo, pese al rango que posee, tras asumir desde el 1 de octubre el cargo de alcalde, por así haberlo determinado los mantenses con 32 mil 500 votos a favor.
Más bien el fenómeno (de invasión de espacios) fue una señal inquietante, en donde surgía amenazante la figura o el síndrome del monstruo de tres cabezas, en donde nadie a quién hay que agradecer el favor, si algo sale bien; o en donde no hay a quien culpar, cuando algo sale mal.
Aquí en Mante la cuestión es que hay un solo alcalde, no dos.
No existe en México (nuestro glorioso esquema republicano) la figura del vice-presidente, aunque algunos lo quieran ejercer.
El primer síndico JOSÉ VÁZQUEZ CANO aún está en tiempo de corregir afanes protagónicos, pues su carrera política en Mante diríamos que apenas empieza.
Está a tiempo de volverse prudente, respetuoso con terceros, atento y sin afanes protagónicos.
Debe saber callar la boca cuando no le pidan que hable. Pues en boca cerrada no entran moscas.
No hay que olvidar que él ha vivido fuera del Mante durante lustros, y volvió al terruño una vez que se acercó el nuevo ciclo de gobierno, cuando Humberto Flores Dewey estaba por concluir su mandato y Pablo González León recién empezaba su campaña proselitista, allá por abril o mayo.
Quizá este chico imberbe llamado Pepe Vázquez Cano aun no sepa gatear y ya quiera correr.
Quizá no sepa cómo se escribe el uno, y ya quiere brincar al dos.
Esta actitud desesperada suya no es sana de ninguna manera. No en política. Y menos entre mismos priistas.
Para triunfar y tener la alacena de casa llena, no hay por qué hacerlo pisoteando campos ajenos.
Pues las vacas propias, son como el mismo nombre lo dice…propias, de uno solo.
Y si alguien quiere poseer muchas vacas dentro de su establo, pues es muy simple…que compre las suyas no con el dinero ajeno, sino propio.
Es menester que el alcalde PABLO GONZÁLEZ LEÓN sea el primero en todo pues prácticamente le restan 3 años menos 2 meses de gobierno; pues es Pablo González León quien da la cara, quien viaja, quien atiende la política interna de su municipio, quien se desvela constantemente para llevarle beneficios a su pueblo.
Tampoco debe permitir PABLO GONZÁLEZ LEÓN que desde adentro de su gobierno le lancen fuego y dardos venenosos al ex alcalde HUMBERTO FLORES DEWEY, quien siempre fue generoso a la hora de determinar –hace casi 3 años- quien habría de ser el gerente de COMAPA en aquél tiempo cuando quedó acéfala debido a que RIGOBERTO RODRÍGUEZ RANGEL ya se había marchado a ocupar la candidatura a diputado local.
Alguien que estuvo en aquél salón con el gobernador (hace 3 años) nos confió que de pronto se oyó la voz de Humberto Flores, a la sazón alcalde en funciones, quien le dijo al mandatario al oído: ‘Señor gobernador, quiero sugerirle a una persona para que ocupe la COMAPA Mante. Es un mantense bien nacido, es un político esforzado, trabajador, que sabe ponerse la camiseta y es responsable a más no poder’.
A lo que EGIDIO TORRE CANTÚ reviró: ‘¿Quién es?
El entonces alcalde le contestó: se trata de Pablo González León.
A ver tráemelo aquí, responde a la vez el gobernador.
Fue entonces que Pablo González, situado a unos 5 metros de ellos avanzó a donde ambos se hallaban.
Y fue en ese momento cuando al hoy alcalde le dijeron: ‘Tu vas a la Comapa, desde ahora te digo’.
En razón de justicia, ya para concluir el tema, diremos que los atarantados polluelos a quienes Pablo González León les dio oportunidad de trabajar en su gobierno, y que ahora se sienten capataces del pueblo, les hace falta mucha memoria e ilustrarse mejor.
Pues lo único que están haciendo con su lengua irresponsable es fracturar al PRI, recurriendo a chismes y arguendes baratos que no ayudan absolutamente nada al correcto mandato que ha empezado a ejercer el presidente municipal Pablo González León.
Por su parte, el Tesorero Municipal JULIO PORTALES MARTÍNEZ destaca hasta hoy por ser uno de los funcionarios de Pablo González León más fieles, eficaces y leales a su capitán del barco, asumiendo desde la tesorería municipal un rol discreto, respetuoso y atento, portándose servicial y educado con todo mundo, entiéndase con el pueblo, con proveedores y con empleados del gobierno local.
Con esto, Julio Portales Martínez extiende sus horizontes, ya de por sí brillantes, y amplía su curriculum enriqueciéndolo en los cuatro costados.
Bien, por ahora es todo, nos leeremos pronto.
