POSDATA
GASTON ESPINOSA GLZ.
Este domingo a las 10:30 horas en la explanada de la presidencia municipal se llevará al cabo la toma de protesta de Pablo González León, como alcalde de El Mante. Pablo llega sumamente arropado por su grupo de trabajo, sus amigos y parientes que siempre le han acompañado en sus andanzas políticas, pero sobre todo asume la responsabilidad de dirigir con atino y honestidad el ayuntamiento cañero avalado por más de 30 mil votos.
Y aunque así de pasadita su equipo de trabajo no es como para apantallar a nadie, lo cierto es que ha sido cauto a la hora de elegir a quienes les acompañarán en esta tarea para evitar desavenencias hacia el interior de su grupo y exponerlos a la opinión pública de forma anticipada.
El reto que tiene Pablo es muy claro, superar en eficiencia, orden y resultados a Humberto Flores Dewey, quien tomó las riendas del municipio con las arcas vacías y con las deudas cercanas a más de 40 millones de pesos, herencia del inefable y torpe Héctor López González.
El nuevo alcalde toma la manija de El Mante con bases cimentadas, y con un tanque de oxígeno financiero que les permitirá maniobrar con certeza y abocarse a otros objetivos en beneficio de la colectividad.
Lo que se mira con preocupación es el hecho de que González León permita, solape y aplauda las ocurrencias y poses de algunos personajes que habrán de estar con el ayuntamiento, ya sea en el cabildo o en alguna otra tarea.
Anote desde ahora usted el nombre de Antonio Guevara, regidor electo y quien aún antes de tomar protesta como tal ha provocado escenas bochornosas como apropiarse de unos lentes de mujer hasta de usar sus influencias para entrar por la libre al teatro del IMSS a grito pelado de “nos sabes quién soy yo?”.
Y es que el capitán Guevara es padre de Luis Alejandro Guevara, actual coordinador de giras de Enrique Peña Nieto, y muy afecto al nepotismo decidió ocupar a sus novias y parientes en cargos públicos, dejando al pueblo una carga onerosa.
Los desplates del capi apenas empiezan, no se sorprenda de nada, el hombre con un poquito de poder será toma de nota en la sociedad. De hecho, el propio Alejandro Guevara Cobos será otro presidentito, pues alocado como anda con su proyecto político dejará sentir su influencia en la próxima administración utilizando su chamba con el fotogénico Enrique Peña Nieto.
Otro de los personajes que sin duda darán de qué hablar es Alberto Medina Trujillo, empresario de buen éxito que en la política simplemente no termina de comulgar con la sociedad. Medina ya pasó por el PRI, PAN, PRD y Verde Ecologista y siempre termina en medio de escándalos.
Su presencia durante la campaña de Pablo fue incómoda pues se paseaba junto a su séquito de prensa, asistente personal, porristas y maquillista. El tipo andaba en campaña, y ahora todo hace indicar que hará lo mismo en el ayuntamiento.
Son Antonio Guevara y Alberto Medina dos tipos dispuestos a presumir su poder y más que ayudar van a estorbar. Si Pablo González les permite eso como hasta ahora así ha ocurrido su credibilidad se irá cayendo.
Otro de los presidentitos es Julio Portales, cuyo destino inmediato está ligado a las finanzas municipales, sólo que este es poco afecto a los medios, los tolera a regañadientes. Si no se entromete en temas de medios y deja la tarea a quien conoce de ellos, el hombre saldrá bien librado.
Estamos a horas de conocer si Pablo asume el mando y control del barco, o simplemente se deja llevar por el viento.
ANTIGUO MORELOS, OTRO CACICAZGO
José Tinajero Castro tomó protesta como presidente municipal de Antiguo Morelos, lo que representa que el PAN dirija por tercera vez consecutiva los destinos de esta comunidad, primero con Carmelo Tinajero, cabeza del grupo y quien de la noche a la mañana se convirtió en rico hacendado que puede darse la gran vida en los Estados Unidos. Luego siguió el timorato e igualmente nefasto Arturo Ibarra “Chávez”, quien se dedicó a proteger los intereses de su patrón “Don Carmelo”.
Hoy le toca a Pepe, un hombre gris, inculto pero muy voraz, quien tiene como misión seguir apropiándose de ranchos, recursos y voluntades así sea poniendo el miedo como arma, no en balde su campaña se hizo mediante el amague y acalambre a las humildes familias, cosa que se confirmó cuando Félix Tinajero, otro hermano de los alcalde, agredió a una familia que apoyaba al candidato del PRI.
Desde la época de Carmelo se permea aquí un estado de terror y corrupción. El cacique panista dejó a su paso obras inconclusas y hasta el presunto desvío de 300 mil pesos para la construcción de un rastro municipal que nunca se realizó.
Su mayor “hazaña” fue engañar a los vecinos del ejido El Refugio quienes le firmaron permisos para la construcción de una represa en esta zona con un valor estimado a los 3 millones de pesos, la cual se hizo pero con el detalle de que fue ejecutada en terrenos de Carmelo. Sus mentiras también las trasladó a las comunidades de “Emiliano Zapata” y “El Salvador”, en donde por igual algunas obras y represas se fueron a propiedades de los Tinajero.
Otro “logro” de los Tinajero es haber generado apoyos oficiales a las familias a través de Fonaes y otros programas federales, pero con la condición de otórgales la mitad del monto recibido. La avaricia y corrupción del panismo que dirige Carmelo le ha permitido ser ahora un potente constructor que a base de engaños y amenazas seguirá disfrutando de las mieles del poder.
No cabe duda que los Tinajero aprendieron mucho de sus amigos y compadres de Xicoténcatl, los hermanos César y Vicente Verástegui Ostos, panistas que entran y salen del ayuntamiento cuando se les antoja.
Los cacicazgos en el PAN se extienden.
