Elba Esther Gordillo Morales, desde la prisión empieza a “ganar” pleitos al gobierno de Enrique Peña Nieto, quien sabe si por habilidad de sus abogados, deficiencias en la PGR, o complicidad, pero el caso es que su abogado pronostica tres meses para que salga la mujer del “bote” y lo haga muy oronda y libre de todo pecado.
Por lo pronto ganó tres amparos, un Juez Federal determinó que la PGR es “ineficiente” hizo las cosas mal, y por lo tanto se tiene que proteger a la “maestra” Elba Esther de esos “abusos y arbitrariedades” en su contra.
Parece lo mismo de siempre, una autoridad que reprime y castiga a sus enemigos hasta que dejan de serlo, en este momento ya lograron su “reforma educativa”, ya frenaron los apetitos del SNTE, y hasta los usaron de comparsa lo que a ojos de muchos quiere decir que llegó el día de pagarle a su líder moral la cuenta dejando en plena libertad.
Si, la sospecha es que Elba Esther se irá con unos meses, quizá poco más, en la cárcel, pero siempre bien atendida, y eso sí, con todo el dinero que dicen se llevó que no es poco, suman más de dos mil millones de pesos que sustrajo, dice la PGR que indebidamente, de las cuentas del SNTE, es decir, de los maestros de México que se dejan mangonear.
Ojalá, por el bien de este país, las cosas se hablen claramente, se diga que ocurre, el deseo es que Elba Esther pague con cárcel todos sus abusos y raterías si las cometió, también que pague el precio justo por hundir en la mediocridad la educación del país y dejar sin una sola oportunidad de salir adelante a los más pobres de México.
No, no pedimos por lo maestros porque si han sido abusados, robados, y hasta exhibidos como torpes es por gusto propio, por no tener los suficientes pantalones o inteligencia para cambiar las cosas al interior de su sindicato.
Lo que se desea es que este México ya no siga siendo lo mismo de siempre, que las cosas cambien, que las oposiciones así como los seguidores sean reales y no de ocasión o comprados en una especie de tianguis de conciencias.
A propósito de que todas las cosas parecen iguales, ayer levantó la voz Enrique Rivas Cuellar, quien será el coordinador de los 10 diputados del PAN en el Congreso local en la futura legislatura, dijo que no será borrego de nadie, que hará valer su condición partidista.
Como Rivas, hemos visto aterrizar en los últimos 19 años a infinidad de diputados del PAN, PRD, PT y muchos otros partidos más al Congreso de Tamaulipas, todos bastante habladores de principio, y tristemente todos salieron siendo unos mansos corderos, unos borreguitos del sistema que los copto a base de billetazos, amenazas, o simple y sencillamente, complicidades.
Desde luego, la ventaja de Rivas es que frente a él no se ve un priísta que tenga capacidad para coordinar un Congreso que tenga una oposición marcada, lo que encarecerá su voz, lo que pudiera hacerle hacer cumplir su palabra, aunque no sea por gusto, si no a fuerza.
Más aún, todos los diputados de “la oposición de antes” tenían en su contra que no aspiraban a ganar la gubernatura ni quien financiara sus proyectos personales o evitará que cayeran en la tentación del sistema, el caso de Rivas parece que su jefe será un alcaldito, que se ve chiquito pero con mucho dinero y mucha ambición.
Real es que Carlos Cantu-Rosas es pequeñito, que solo le ven estatura quienes no notan la forma que utilizó los zancos de Ramón Garza Barrios y Horacio Garza Garza, es decir, para afuera lo hacen parecer gigante pero al interior no pasa de ser traidorcillo del tricolor.
En serio, hacemos votos porque Rivas conserve su independencia, hacemos votos porque cada una de sus palabras se hagan realidad al estar despachando como diputado, que sea una oposición real, que pueda obligar a hacer consensos para que a Tamaulipas le vaya mejor.
También hacemos votos porque sea parte de una oposición real pero responsable, es decir, no de esas que no saben decir otra cosa que un no a la propuesta del gobierno o del PRI, sino que argumentan las negativas o lo que voten a favor y además propongan.
Pero sobre todo, hacemos votos porque no le vaya a tocar de coordinadorcito del congreso un coterráneo que no supo consensuar, que al final de su jornada resultó soberbio, que su capacidad política ni siquiera fue suficiente pagar ganar la casilla en la que le tocó votar, es decir, que ni sus vecinos le quieren.
Entonces, ojalá Rivas no resulte ser uno más, lo decimos de todo corazón, lo decimos por Tamaulipas, y que tampoco el coordinador sea Ramirito, porque entonces si no sabríamos que hacer con un borrego enloquecido y un pastorcito inútil.
A propósito, lo que no parece igual es la actitud del gobernador actual respecto a la forma de enfrentar los problemas, ayer salió a visitar casa por casa en El Limón, allá en Mante, y en Ocampo, dos municipios que se vieron afectados por Ingrid, eso quiere decir que va a constatar en territorio y a llevar apoyos de inmediato, más aún, a decirle a la gente que cuentan con él.
Quizá lo mejor es trascribir parte de la entrevista que dio a mediodía, a la hora que dijo que ña reconstrucción, y con calidad, será una prioridad y se hará muy pronto, que el dinero tendrá que salir de donde sea necesario.
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