México • El vocero del Partido de la Revolución Democrática (PRD) para la reforma energética, Cuauhtémoc Cárdenas, consideró ayer que la iniciativa de reformas constitucionales a los artículos 27 y 28, enviada por el presidente Enrique Peña Nieto, no es más que una propuesta “mágica, sin sustento”, porque no llegó acompañada de una propuesta de legislación secundaria con cifras que detallen cómo se invertirá, en qué y cómo van a bajar los precios del gas y la luz.
“Las dos reformas constitucionales, parecen ser, desde mi punto de vista, reformas mágicas. Esto es: quitamos una palabra del 27, que es contratos. Quitamos dos palabras del 28, que son petróleo y electricidad, y todo lo demás, empleo, crecimiento económico, etcétera, se resuelve como por arte de magia. No nos dicen en qué se quiere invertir”, criticó Cárdenas Solórzano al participar en los foros de discusión organizados por el Senado.
Por ello, el fundador del PRD advirtió que eliminar el carácter estratégico de este sector con reformas al artículo 28 constitucional, como propone la iniciativa presidencial, abre la posibilidad de que el Estado sea desplazado totalmente de los sectores petrolero y de la electricidad, lo que le permitirá deshacerse en su momento de los activos de dichas empresas y, por ello, “dígase lo que se diga, es privatizadora”.
Cárdenas Solórzano defendió la iniciativa “progresista” presentada por el PRD, con base en reformas legales y una nueva ley que crea el Fondo de Estabilización Petrolera, al rechazar que en su decreto de 1940 el ex presidente Lázaro Cárdenas haya tenido la intención de privatizar el sector petrolero.
El ex candidato presidencial hizo notar que en la propaganda oficial no menciona la reforma al artículo 28, porque no solo pasaría a dejar de ser estratégica, sino prioritaria, colocándola a la par de industrias como la de los dulces chatarra o las confecciones de vestidos finos.
“Abre la posibilidad de que el Estado sea totalmente desplazado de los sectores petrolero y eléctrico e incluso estaría autorizado para deshacerse de todos los activos de Petróleos Mexicanos y de la Comisión Federal de Electricidad, al dejar si materia lo establecido en el párrafo cuarto del artículo 25 constitucional”.
En ese sentido, sostuvo que dígase lo que se diga, la iniciativa del Ejecutivo es privatizadora, pues el gobierno perfila, con claridad meridiana, la intención de desplazar a Pemex de toda la cadena productiva, sustituyendo a la petrolera por particulares.
En su turno, la senadora priista Graciela Ortiz le cuestionó por qué se opone a la reforma si su padre, con visión de futuro, previó abrir el sector a la iniciativa privada.
Afirmó que el PRD no se opone a la inversión privada, pero cuando se emitió el texto de 1940 había otra condición para México y su sector petrolero.
“Yo podría decir que la visión de Lázaro Cárdenas en el transcurso del tiempo fue siempre en buscar el fortalecimiento de una industria nacionalizada, hay muchos textos que así lo señalan”, estableció, al refutar que experiencias internacionales puedan aplicarse a México, pues por ejemplo si Cuba se abrió a la inversión privada es porque produce apenas 52 mil barriles, contra los 2 millones que entrega México.
Claves
Otras voces
– La senadora del PRI Graciela Ortiz afirmó que la iniciativa presidencial es un texto progresista y de avanzada, pues permite al Estado que a través de contratos dirija la participación de particulares en la industria del petróleo y del gas, de la forma que más le convenga a la nación.
– El líder de los diputados del PVEM, Arturo Escobar, dijo que se necesita de la IP y que México se asocie sin tener que ceder renta petrolera para maximizar el valor de los hidrocarburos mexicanos.
– El senador del PAN, Jorge Luis Lavalle, resaltó que la iniciativa del PRD y la del PAN tienen más coincidencias que diferencias. “Estamos convencidos de que PEMEX y CFE no han podido funcionar en forma más eficiente por las características de su gobierno corporativo y régimen fiscal”.
