Para el regidor panista Dávila Crespo el sumario de los dos años y medio de gestión del alcalde Álvaro Villanueva Perales merece, cuando menos, una calificación reprobatoria.
El panista explica que los malos manejos del dinero público así como el desvío de recursos son métodos que se practican de manera subterránea y aunque acepta que el cabildo es en parte encargado de supervisar la aplicación correcta del dinero, justifica que haya estas anomalías debido a que los programa de obra que no son supervisado eficientemente además de que los programas de mantenimiento preventivo son “circulares y deficientes” por lo que es casi imposible rastrear y fiscalizar los mas de 500 millones de pesos del presupuesto municipal.
“Vemos la cobertura con una delgada capa de asfalto que se le están dando a calles que están pavimentadas con concreto hidráulico, como la calle Bravo y muchas mas, y creo firmemente que lo hacen para justificar los gastos que después meten como si hubieran pavimentado con concreto hidráulico, cuando en realidad la pavimentación con concreto es urgente en colonias que tienen mas de 15 años de estar en espera de este beneficio”
Dávila Crespo afirma que además de lo inútil de este gasto, el trabajo se realiza de manera incorrecta ya que a las primeras lluvias el asfalto empieza a desprenderse dejando grandes hoyancos debido a que obras públicas no se realizan los trabajos de estudio y compactación necesarios, ya que son solamente “manitas de gato” que se les aplican a las calles ya pavimentadas para poder justificar gastos que posteriormente son inflados por la Dirección de Obras Públicas, llevándose así los corruptos funcionarios una enorme tajada del dinero que debería ser utilizada para hacer realidad las promesas de pavimentar las colonias que Álvaro Villanueva visitó en su campaña y que ahora se encuentran totalmente olvidadas.
Otra de las aristas de corrupción que menciona el regidor son los múltiples fraccionamientos que se edifican a diestra y siniestra en la ciudad, fraccionamientos que son autorizados al vapor por ordenes directas del alcalde debido a los compromisos que contrajera con los constructores cuando estos lo apoyaron con dinero para su campaña, además de que se menciona que es socio en varios de ellos.
Dávila denuncia que debido a estas componendas la supervisión que se debería de realizar en los fraccionamientos parra que cumplieran con las normas de introducción de servicios básicos y pavimentación no se realiza, dejando al constructor en libertad total de hacerlo o no, de acuerdo a su propia ética lo que da como resultado que la mayoría realice trabajos pésimos que solo son para aparentar que cumplieron con la reglamentación, cuando en verdad son un total y completo fraude ya que la mayoría de los trabajos empiezan a deteriorarse a los pocos meses de haber sido construidos.
“Álvaro ha sido, en opinión de muchos, uno de los alcaldes que mas se ha beneficiado económicamente con su puesto y ahora va por la diputación para poder conservar y acrecentar sus negocios que amasó al amparo del poder”
