Política

Con Urbanidad

Por: Vicente Hernández

“Cuando el sabio señala la luna, el tonto se fija en el dedo”
‹Anónimo›

Terminado el proceso electoral y con la toma de protesta la fiesta termina, pero a partir de ayer dio inicio al tradicional ritual del “besamanos”, por lo que las oficinas administrativas del gobierno municipal de Altamira lucieron mas solas que de costumbre, la de los regidores no es novedad ya que siempre han permanecido igual que un camposanto, pero este marcado ausentismo se debe a que los directores, síndicos, regidores y empleados de confianza del primer círculo, se trasladaron a ciudad Victoria para felicitar personalmente al nuevo Gobernador del Estado Américo Villarreal Anaya, y tomarse la foto, o la selfi, y presumir a sus amigos su cercanía con el nuevo gobernante (al menos al momento de la foto) y al mismo tiempo relacionarse con los nuevos integrantes del gabinete estatal para futuras chambas y candidaturas para el 2024.

Pero también en los círculos empresariales ya empiezan hacer futurismo político, y fue nada mas y nada menos que el titular de la Federación de Cámaras de Comercio de Tamaulipas (Fecanaco) Julio Cesar Almanza Armas, quien declaro a los medios informativos (para querer decir “aquí estoy”) que ojala y el nuevo gobierno no descuide el rubro de seguridad, ya que dijo tajante, que sin seguridad no hay desarrollo ni inversión, pero nostálgico por el gobierno que termina hoy por la noche declaro: “Las cámaras pedimos que no se pretenda de manera riesgosa el reinventar el estado cuando lo que debe hacerse es tomar la experiencia positiva de gobiernos anteriores y mejorarlas gradualmente.” ¿Así o más panista?

Y a propósito de las elecciones del 2024, me enteré que el IETAM solicita un presupuesto de 406 millones 678 mil 155 pesos para su ejercicio fiscal en el 2023, y aunque la cantidad suena alta es menor en comparación con el ejercido en el presente año por 551 millones 693 mil 690 pesos, dentro del presupuesto solicitado por el IETAM se contempla, la compra de materiales electorales, así como equipos de cómputo con miras a los comicios locales del 2024, y quizás usted se pregunte porque se gastaron tantos millones en esta elección ¿Tan caro nos salió el Gobernador? Yo pienso que no, porque de acuerdo al informe presentado por el IETAM, en las elecciones locales del 2021 y 2022, no se compraron mamparas, canceles y urnas, pues se reutilizaron una parte de los usados en comicios anteriores y otras cedidas por el Instituto Nacional Electoral de otra manera la cantidad hubiese sido mucho mayor, así que si usted piensa que la democracia es cara, mas se gasta en otras cosas y ni atención le ponemos.

Realmente no se que pensar de los Diputados y Senadores, que pierden el tiempo que nos cobran a los contribuyentes a precio de oro, con discusiones sobre si se aprueba o no la eliminación del Horario de verano, por lo que a mi respecta el cambio de horario es una reverenda vacilada, porque el supuesto ahorro de energía eléctrica no se ve reflejado en el recibo que tenemos que pagar bimestralmente, si no queremos que la CFE mande a sus acólitos para cortarnos la energía en nuestros hogares.

Me congratula saber que la Cámara de Diputados aprobó reformas constitucionales en el artículo 123 de la Constitución, una de ellas es referente a la discriminación laboral que sufrimos las personas mayores de edad, ya que el 90 por ciento de las ofertas laborales excluyen a personas mayores de 35 años, y solo el 10 por ciento de las plazas está disponible para personas entre los 35 a los 50 años de edad, sin tomar en cuenta que los que rebasamos estos limites de edad, tenemos la experiencia que las empresas solicitan a un joven de 25 años, que recién egreso de alguna universidad, y que obvio no cuentan con la debida experiencia laboral del ramo que lo solicita, pero también me complace saber, que se aprobaron reformas constitucionales para evitar que sean embargables los recursos provenientes de programas sociales, aunque en muchos casos, son los mismos familiares quienes “embargan” esos recursos, aduciendo una “administración mas cuidadosa” y bien que se gastan en otras cosas el dinero de la pensión de sus padres, abuelos o parientes, que por su edad dependen de su cuidado.

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