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Invade viejo PRI a la 4T en Ciudad Victoria para saquearla

Por Mauricio Fernández Díaz

Ciudad Victoria.- No hubo en Tamaulipas ni en Ciudad Victoria un gobierno más elitista que el de Egidio Torre, envenenado de rencor por la muerte de su hermano, Rodolfo Torre. Nada quería saber de los partidos ni de sus miembros, incluido el PRI. Sus pocos amigos eran los constructores millonarios de la capital, como Manuel Rodríguez, y ciertos personajes que llegaron de Nuevo León a hacer negocios y hundir al estado en deudas. Para desgracia del victorense, estos aventureros están de vuelta y se han refugiado en la Cuarta Transformación. ¡Nadie sabe para quién trabaja!

Una academia de baile callejero o urbano para su hija es el legado de Egidio Torre en la capital. Su agriado carácter lo alejó del ciudadano común, frente al cual antepuso una muralla de diez escoltas que lo acompañaban a todas partes. Egidio inauguró una costumbre humillante que aceptaron varias empresas de comunicación con tal de obtener publicidad: un corral enrejado donde meter a los reporteros para no topárselos de frente, expresión viva de su inseguridad y despotismo. Estas ideas, los guardias y el cercado, se las propuso un personaje venido de la Sultana del Norte a abusar del presupuesto de los tamaulipecos: Guillermo Martínez García, el “Memo Martínez”.

Al asumir la coordinación de Comunicación Social, Memo Martínez se convirtió en el brazo derecho del gobernador y en su funcionario más confiable. Con ese poder ordenó atacar a los secretarios del gabinete que lo cuestionaban, asignó contratos millonarios con agencias de Monterrey y negoció candidaturas a las alcaldías a cambio de algunos negocios de proveeduría, para los cuales utilizaba a terceras personas, de acuerdo con el testimonio de algunos candidatos. Mucho de ese dinero reposa hoy en cuentas de Nuevo León, no de Tamaulipas.

Uno de esos proveedores era Jorge Vela, quien sirvió por varios años a los priistas Eugenio Hernández y Ricardo Gamundi en tareas de difusión, incluso ocupó la jefatura de prensa del PRI Tamaulipas. Con Hernández y Gamundi Cuidad Victoria se convirtió en la capital del table-dance y el vicio, y a partir de ahí comenzó su decadencia.

Jorge Vela se ganaba la vida grabando videítos al inicio del sexenio de Egidio Torre hasta que le llegó de nuevo la oportunidad; se originó un cambio de funcionarios para preparar la campaña de la gubernatura siguiente, y Memo dejó la coordinación de Comunicación Social en junio de 2015. Su lugar lo ocupó Emiliano Fernández, y con él entró Jorge Vela, a quien designaron director de Información. En realidad, los dos le debían su nombramiento a Guillermo Martínez.

Los gastos en comunicación tanto de la campaña y como del mismo gobierno del estado, con el fin de influir en los electores, fueron en vano, y el PRI perdió en 2016. Sin embargo, Memo y sus cómplices se empacharon de ganancias.

Hoy, Memo Martínez y Jorge Vela están de vuelta en Ciudad Victoria para hacer lo mismo de siempre: gastar millones de pesos en difusión inútil. Y no ha sido necesario que regrese el PRI al gobierno municipal o estatal para el reacomodo de ellos: eso es lo más escandaloso. Han llegado a lomo de Morena, partido que se ufana de luchar contra el Revolucionario Institucional y de impulsar la transformación de la sociedad.

Esto demuestra que el fraude electoral más grave no es aquel que tergiversa el resultado sino el que engaña al elector al hacerse pasar por un partido de avanzada cuando es, en el fondo, un partido de retroceso.

El Gobierno 2021-2024 de Ciudad Victoria pertenece nominalmente a Morena y debería ser congruente con los objetivos de ese partido, como democracia y lucha contra la corrupción. Memo Martínez ha entrado y salido por lo menos tres veces del Palacio Municipal en este año y ha revelado a cercanos que lo trae un asunto “de trabajo”. Memo Martínez, por sus hechos, nunca ha aportado nada a la democracia ni a la lucha contra la corrupción.

Y Jorge Vela, ¿qué ha aportado a esas aspiraciones? Nada, pero el gobierno municipal lo ha premiado con un nombramiento de asesor.

Apenas se ha cumplido un tercio de la administración municipal de Ciudad Victoria y ya circula un informe gastos de más de 20 millones de pesos a Comunicación Social, cuando se había notificado que no habría contratos para esos servicios. Falta validar dicha información, pero no es una coincidencia que se ejerzan esas cantidades y aparezca el priista Jorge Vela como asesor.

Dinero presupuestado y luego desaparecido, dinero ya dispuesto y nunca entregado, esas son las historias que involucran a la gente de Memo Martínez y que ahora trabajan en el municipio de Ciudad Victoria. En internet hay constancia de un escándalo por pagos autorizados por el entonces candidato Baltazar Hinojosa que jamás llegaron a sus destinatarios. De ello escribieron en su momento los columnistas Ángel Guerra, José Inés Figueroa y Alberto Guerra.

Los involucrados en el dinero desaparecido fueron Memo Martínez, Jorge Tinajero y Jorge Vela. Repetimos, de ese tema escribieron periodistas de larga trayectoria, y sus textos aún se encuentran en la red de redes.

Bueno, esos priistas ahora tienen mando en el municipio de Ciudad Victoria, supuestamente gobernado por Morena.

Ignoran que sus pisadas ya las oyó Irving Barrios y la Contraloría, que son panistas, pero dejemos hasta aquí el comentario.

Esta historia continuara.

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