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Normalistas inician semana de lucha, a 7 años de la desaparición de los 43

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Estudiantes de la escuela normal rural de Ayotzinapa comenzaron este día la jornada de lucha para seguir exigiendo justicia a siete años de la masacre y desaparición de 43 de sus compañeros en la ciudad de Iguala, el pasado 26 de septiembre de 2014.

En Chilpancingo, capital del estado de Guerrero, los estudiantes realizaron un mitin en el monumento a Las Banderas, ubicado sobre la calle Lázaro Cárdenas, lugar desde donde pidieron perdón, a los familiares de las víctimas fatales de un accidente registrado este fin de semana.

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Reportes oficiales indican que el sábado 18, un autobús donde se desplazaban normalistas de Ayotzinapa embistió un auto compacto sobre el libramiento que conecta Chilpancingo con el poblado de Tixtla, donde fallecieron dos personas identificadas como Jacinto Palacios y Raquel Acosta.

Al respecto, los estudiantes se deslindaron de la tragedia argumentando que ellos “no conducen” las unidades que mantienen tomadas con el aval de empresas privadas para sus traslados y demandaron a las autoridades ministeriales que realicen una investigación y sancionen a los responsables.

Por ello, señalaron que su movimiento está enfocado en exigir justicia por la masacre y desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, crimen que sigue impune y rechazaron afectar a la sociedad con las protestas que realizan.

Luego, se retiraron a las casetas de Palo Blanco y Paso Morelos, ambas ubicadas sobre la autopista del Sol, para cobrar el peaje y recaudar fondos económicos para su jornada de protestas que comenzó este lunes 20.

Para mañana, los inconformes anunciaron que van a tomar instalaciones de empresas radiofónicas que operan en Chilpancingo para difundir su mensaje.

El miércoles 22, tienen programada una protesta en la sede del Poder Judicial del estado de Guerrero, en Chilpancingo, al siguiente día, jueves 23, un mitin en la estela de Los Caídos en la ciudad de Iguala.

El viernes 24, los familiares de las víctimas van a sostener una reunión con el presidente Andrés Manuel López Obrador en Palacio Nacional de la Ciudad de México.

Luego, el sábado 25, tienen contemplado realizar una protesta en la sede de la Fiscalía General de la República (FGR), ubicada sobre la glorieta de Los Insurgentes y el domingo 26, será la marcha nacional a siete años de la tragedia que sigue impune.

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