Mucho ha sucedido en el caso del gobernador -hoy prófugo- de Tamaulipas en esta semana que hoy termina, y mientras algunos ven desesperados cómo se les esfuman sus aspiraciones personales, otros no tan ingenuos empiezan ya a desmarcarse de Pancho García Cabeza de Vaca, a quien cada día que pasa otro golpe le propina la justicia. Y mientras éste se ve cada vez más acorralado, en lugar de salir a dar la cara y enfrentar las acusaciones en su contra como cualquier persona honesta que nada debe, comienza, por el contrario, huyendo de la justicia escondiéndose detrás de la víctima que siempre ha tratado de simular, y al verse cada vez más hundido frente a las contundentes pruebas que lo incriminan, en un acto de desahucio político, se refugia en la impunidad de un fuero -que ya no tiene- y que nunca mereció gozar.
Primero, como lo habíamos adelantado en entregas previas, la orden de aprehensión en su contra era inminente y sólo una cuestión de tiempo, ya que al no admitir la Suprema Corte la controversia constitucional presentada por el Congreso del Estado, la Fiscalía podía en cualquier momento solicitarle al juez que la dictase, dadas -volviendo al meollo del asunto-, las abrumadoras evidencias que, por cierto, se vinieron a reafirmar con la carta que envió la embajada de Estados Unidos a la UIF en donde se informa que efectivamente existe una investigación abierta del FBI en su contra, de su esposa, sus hermanos, un primo, su suegro, y su mamá, además de una larga lista de empresas fachada, por presuntamente estar involucrados en el delito de lavado internacional de activos.
Una vez emitida la orden de captura contra García Cabeza y compañía, que por cierto es por los delitos de operaciones con recurso de procedencia ilícita y delincuencia organizada, a diferencia de por lo cual se le desaforara (hay que recordar que la solicitud de la Fiscalía fue la procedencia para ejercer la acción penal por el delito de evasión fiscal), inmediatamente después la Unidad de Inteligencia Financiera, ordenó el congelamiento de más de 40 cuentas pertenecientes a 12 personas físicas y 25 jurídicas. Sobre el tema en su cuenta de Twitter, el titular de dicha dependencia, Santiago Nieto Castillo, publicó: Aparte del congelamiento de dichas cuentas, continuaremos las investigaciones para determinar si de la red de Francisco “N”, o del Gobierno del Estado se financiaron de forma ilícita campañas electorales. En su caso presentaremos las denuncias correspondientes. Cero tolerancia a la corrupción y la impunidad, sobre todo a quienes se creían intocables.
A todo esto, lo único que se ha escuchado de Pancho García ha sido un Tuit en donde se cobija tras un pronunciamiento del PAN y otro del cuasi extinto PRD en donde, de nuevo, sin tocar el tema de culpabilidad o inocencia, o de las evidencias (más que claras) del rastreo de la ruta de los dineros y de los reales beneficiarios de los mismos, o del involucramiento de su círculo familiar más cercano en las fechorías cometidas, rechazan la propuesta del senador Ricardo Monreal, de convocar a un periodo extraordinario para declarar la desaparición de poderes y nombrar a un gobernador provisional en nuestro Estado. De nuevo esto demuestra que nadie, en su sano juicio, se atreve a defender lo indefendible, cuando ni siquiera el propio imputado se atreve a sacar la cabeza del pozo, menos aún los del Clan que serán los que siguen en caer, a no ser que ya algunos, incluyendo el que no se vendía y tampoco se doblaba, ya se dieron a la fuga.
Adendum:
Tanquetas afuera de Casa de Gobierno en Victoria… más para despistar que para intimidar. O apoco se van a atravesar si llegan los federales a cumplimentar la orden de captura contra su gobernador. A quién quieren engañar.
Y esa broma de punto de acuerdo en donde al vapor los diputados locales del PAN votaron por denunciar al juez Iván Aaron Zeferin Hernández, quien, apegado a la ley, y basado en las pruebas más que contundentes, emitió la orden de aprehensión, aun suponiendo -sin conceder-, que éste al juicio de sus servidores, no haya sido desaforado, a estas alturas del partido deberían repensar estos lacayos del gobernador que los convierte en cómplices de la corrupción estar defendiendo en tribuna el fuero de un presunto delincuente cuyos antecedentes apuntan a una evidente e indiscutible culpabilidad.
Y así se quieren reelegir. ¡No tienen vergüenza!
