Política

¿De Cabeza de Vaca a Cabeza de Buey?

Graves errores cometió el góber Cabeza de Vaca al defenderse de las acusaciones que le arrojó la FGR de Gertz Manero, merced a una investigación concienzuda de la Unidad de Investigación Financiera, en el sentido de que le falta un grado para ser la Barbie y unos pocos más para ser Tony Tormenta. Primero, recurrió a la muy manida frase de “¡Esto es una persecución política!”, misma que han utilizado los últimos gobers preciosos de Tamaulipas que, curiosamente, han terminado en el tambo o están esperando llegar al tambo, próceres como Manuel Cavazos Lerma, Eugenio Hernández y Tomás Yarrington. La neta, habría sido menos nocivo si el señor Cabeza hubiera dicho “si te vienen a contar cositas malas de mí…” Segunda pifia: no hacer caso a la segunda máxima del Twitter, “Antes de tuitearlo, hay que pensarlo muy bien” sobre todo cuando afirmas que nunca en la vida has cometido un delito, siendo que en sus mocedades fue detenido en McAllen no por exceso de shopping sino por robar armamento, papá. O sea, es que cuando uno se autosabotea de esa manera, Francisco sí tiene la culpa. Y lo peor es que se lleva entre las patas a gente muy fina y muy formal como el ex presichente Jelipillo que, con sus arrebatos tuiteros de costumbre, defendió al góber como si fuera el Niño Fidencio, utilizando el mismo término que ya debería causar multas onerosas: lo de Cabeza de Vaca es una persecución política, frase también atribuible a Javidú. Esto puede ser contraproducente para el esposo de Margarita pues además de las pesquisas institucionales, ahí están los trabajos periodísticos de Proceso; no vaya siendo que le pase lo que con García Luna Productions y termine negándolo tres veces. Algo que quizá tenga que hacer con Javier Lozano que en una foto sale con el huachicolero mayor, “El Cachetes”, y con el magistrado Carlos Loranca Muñoz que apenitas fue dado de baja por el Consejo de la Judicatura Federal fundamentalmente por transa. ¡Qué amistades! Y tercera, en vez de dejarse asesorar por Gil Zuarth que obligó al góber a venir a la Ciudad de México a hacer una melodramática y cursi bravata, mejor que el tamaulipeco se deje couchear por David Colmenares de la Auditoría Superior de la Federación, le iría mejor, ya vimos que es bien profesional. O por Pepillo Origel que siempre se sale con la suya y a pesar de sus movidas chuecas ya le pusieron la segunda vacuna en EU. No vaya a pasar que Cabeza de Vaca pase a Cabeza de Buey. jairo.calixto@milenio.com

@jairocalixto

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