Columnas

LA CAÍDA DE AMLO…

MELITÓN GARCÍA DE LA ROSA

Aunque hay varias teorías, lo cierto es que la caída en la aprobación del Presidente Andrés Manuel López Obrador es multifactorial, según mi opinión, y creo que no pasará la mitad de este año en que más de la mitad; es decir la mayoría de los mexicanos, desaprueben su gobierno.
Así es mis queridos boes, no es un deseo personal, es más bien un pronóstico basado en las encuestas que circulan a nivel nacional y que han dejado de ser ‘presumidas’ por los seguidores del tabasqueño en los últimos meses, a diferencia de como ocurría a principios del 2019.
Nadie lo niega, porque sería un absurdo, que AMLO ganó por amplísima mayoría, obtuvo además la confianza plena de los mexicanos que le dejaron con mayoría en las dos cámaras legislativas; el hartazgo era evidente.
Diciembre, enero, febrero, marzo y abril fueron de gozo para el inquilino del Palacio Nacional y los suyos; a cuanto se atrevía a cuestionar alguna decisión presidencial, le recetaban en la cara las encuestas que lo ubicaban por encima del 80% de apoyo popular.
‘El pueblo bueno’ dando el voto de confianza y esperanzado en que México realmente estaba entrando en la Cuarta Transformación que nos vendió El Peje.
Facebook y Twitter fueron inundados de post con los resultados de las encuestas, una de ellas, de las más serias decían los pejistas, las del Gabinete de Comunicación Estratégica, una de las más citadas también por los medios nacionales e internacionales.
Enero 30 del 2019, en los cuernos de la luna, la encuesta de GCE que le dio la vuelta a México, publicada por ejemplo en Fórmula y Forbes y comentada por casi todos los opinadores y festejada por la grey morenista indicaba que el presidente tenía la aprobación ni más ni menos que del 86.2 por ciento de los mexicanos.
“Ya hasta los que no votaron por él lo apoyan”, decían animados los de la 4T.
Febrero, marzo y abril, la variación no fue gran cosa, aunque si a la baja, nada que le preocupara a AMLO y los suyos: 84%, 83% y 77% respectivamente de aprobación.
Pero llegó Mayo y con ello los focos amarillos tirando a colorados comenzaron a asomarse por la 4T, porque en tres meses y cacho, López Obrador ya había caído del 86.2 al 72% de aprobación, 14 puntos de diferencia.
La baja en el apoyo popular no se detendría hasta la fecha, porque ayer GCE publicó la encuesta que realizó en las últimas semanas y que tendría necesariamente que haber hecho sonar todas las alarmas de Palacio Nacional y el búnker de MORENA, porque del 16 de enero de este 2020 al 21 de febrero en que se culminó el estudio AMLO perdió 12 puntos terminando en esta fecha con el 50% de aprobación; es decir en 35 días.
Pero el dato se lee peor para López Obrador si se compara aquel 86.2% que traía en enero del 2019 con el 50% que tuvo febrero del 2020. Hablamos pues de 36 puntos porcentuales perdidos en un año, en el primer año, el de la llamada luna de miel, en el que todo o casi todo se le perdona al presidente. Miren viéndola desde abajo; es decir de los que desaprueban: en enero del 2019 solo el 10.2% lo desaprobaba, hoy en febrero del 2020 esa cifra llegó al 45.5%, debe ser terrible para el señor presidente.
¿Qué desplomó la aprobación de AMLO?, todos los escándalos juntos, pero unos más que otros.
Para mi, la terrible crisis de medicamentos que estalló apenas llegó la 4T y que a la fecha mantiene sin tratamientos a cientos de pacientes con cáncer, VIH y procesos de cirugía cancelados en muchas partes del país, porque no hay material.
La falta de empatía de López Obrador con los padres de los niños con cáncer que se han manifestado a veces pacifica y a veces violenta, tachándolos de porros o manejados por los conservadores.
Es evidente que la deficiente operación del INSABI y la desatención a los hospitales y centros de especialidades ha encanijado a muchos mexicanos, mientras del presidente solo escuchan las mismas excusas de 15 meses: fue la mafia del poder, los conservadores.
Pero al tema de la crisis en salud, se sumó, porque el primero no se ha resuelto, el de los movimientos feministas a los que AMLO y su gabinete ya mostraron su antipatía y eso les ha costado tal vez las peores manifestaciones de repudio.
El presidente se atrevió, por ejemplo, en una conferencia pedir que el tema de las mujeres muertas por feminicidios no opacara la rifa del avión, les suplicó además que no le rayaran las paredes del Palacio Nacional, cero empatía, cero tacto político y las feministas enardecieron.
Hoy está programado un Paro Nacional de Mujeres para el 9 de marzo y AMLO y los suyos aseguran, sin pruebas, que este es orquestado desde la derecha, el conservadurismo pues.
Hay otros temas que le han pegado al presidente, obvio que el ridículo que hicieron en octubre con la captura y luego liberación de Ovidio Guzmán en Sinaloa, la riqueza inexplicada de Manuel Bartlett, los pésimos resultados en seguridad, la desaceleración económica y muchos otros. En síntesis el Pueblo bueno está dejando de ser pendejo!
Comentarios: meliton-garcia@hotmail.com Twitter: @melitong

Fuente: Expreso.press

Notas relacionadas

Botón volver arriba