Estado

Un año después…

El próximo domingo 1 de octubre se cumple un año  de que inicio la administración estatal, por primera vez emanada del PAN, y por ello el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca acudirá este 29 de septiembre al Congreso para entregar su primer informe de actividades, de gobierno.

A usted, ¿cómo le ha ido con los vientos de cambio?, las respuestas seguramente serán de todo tipo, desde quienes están felices por la nueva forma de gobernar o ya no toleraban otro gobierno del PRI hasta los dolidos y los afectados por las circunstancias del Estado que creen todo sigue igual. Exacto, los resultados de un gobierno para desgracia o felicidad de los políticos se miden más en percepción que en números tangibles, es decir, no siempre reflejan la realidad.

Más allá de su respuesta en lo personal me agradaría que coincidiera con en el primer informe y mensaje político que ofrecerá el gobernador a partir de las 12 del día de este viernes porque demostraría ante propios y extraños que sigue siendo el mismo, el hombre que propone, construye e igual critica, más aún, que acepta las quejas de la gente y es capaz de atender las mismas así deba hacerlo personalmente lo que le valió para ganar la elección del año pasado.

En los hechos hay cosas que definitivamente no tienen comparación alguna con el sexenio anterior, de un año para acá el gobernante anda en la calle, escucha y hasta fue capaz de atender los reclamos de la gente cuando tuvo que cambiar a su primera titular de la Secretaria de Salud o darle para atrás a una reforma al Código Penal que atentaba contra el derecho de libertad de expresión, lo opuesto con Egidio que le tenía un pavor al pueblo, a caminar Tamaulipas.

Más difíciles de percibir, porque la gente desea que la violencia e inseguridad sean de cero, también se puede hablar de que hay cambios sustanciales en la Secretaria de Seguridad Pública y en la Procuraduría, por ejemplo, el sexenio pasado muy pocas veces se pudo saber de policías estatales que enfrentaran a delincuentes y detuvieran a alguno de importancia, igual eran verdaderos milagros las actuaciones de la policía ministerial de la que más escasas veces se pudo conocer que atraparán a un secuestrador o delincuente cosa que en estos días sucede con más frecuencia, cheque ese dato y se encontrará con que antes siempre fue la Marina o el Ejercito quienes hacían esa chamba en la medida de sus posibilidades, a veces hasta por cuestiones de suerte.

Igual en seguridad pública se puede calificar de acierto la nueva policía creada para dar servicio en carreteras, los hechos detallan que no es una simulación porque ya se ve vigilancia en nuestras rúas y quizá la mejor señal de avance es que el gobierno de Estados Unidos ha aceptado policías de Tamaulipas para capacitarlos en algunas áreas.

Claro, usted también tiene toda la razón, siguen las ejecuciones, la violencia, e incluso la percepción de que falta mucho por hacer pero le invito a no cerrar los ojos, si es un hecho que se avanza a pesar de las circunstancias en las que se recibió el Estado de los gobiernos tricolores.

Saqueadas hasta la saciedad en el sexenio de Egidio Torre, las Secretarias de Salud y Educación son muy difíciles de evaluar, sobre todo porque sus resultados no se ven de la noche a la mañana así que en ambos apartados usted tendrá la palabra.

Desde luego que hay eslabones débiles, a veces da la impresión de que en materia de administración se castigó a justos por pecadores, de que muchos funcionarios no entendieron el mensaje del gobernador y les ganaron sus odios al PRI corriendo a muchos trabajadores que no se lo merecían, e igual es un hecho que en materia de obra pública poco se sabe porque los funcionarios de esa dependencia prefieren estar fuera de los reflectores.

En resumen, es un hecho que faltan cosas por hacer pero también es una realidad de que hay logros, de que se está poniendo orden.

Un año después la gente sabe que las cosas han cambiado, comprende que no hay una varita mágica para cambiar de la noche a la mañana todo lo que vivíamos y los hizo votar por un partido distinto al que nos gobernó por décadas, más aún, se conserva la esperanza como hace 365 días y eso es bastante para Tamaulipas, ¿qué sigue?, pues desde aquí hacemos votos por mayor participación ciudadana, porque la gente entienda que es la hora de apoyar a Francisco García Cabeza de Vaca, de gobernar con él, no significa agachar la cabeza sino apoyar lo bueno, proponer en las dudas, acusar y exhibir en los excesos y las fallas, sobre todo cuando se vea que tienen origen en la mala fe de algún vivales.

Marco A. Vázquez

Notas relacionadas

Botón volver arriba